La oposición clama un triunfo al haber doblegado ‘maniobras autoritarias’. Chávez dice que él es quien instauró la figura del referendo revocatorio y que aprovechará éste para re-potenciarse.
Estos dos meses Venezuela vivirá una polarización que afectará al continente. Un triunfo oficialista fortalecerá a quienes plantean una mayor injerencia estatal en los recursos naturales y distribución del ingreso, favoreciendo a la izquierda y debilitando a Washington. La victoria opositora beneficiará a quienes promueven el liberalismo político y económico y una línea dura contra Cuba y la subversión colombiana.
En el lado ‘bolivariano’ hay desde quienes quieren evitar agudizar conflictos hasta sectores sindicales, barriales o campesinos que demandan más radicalización ‘anti-imperialista’. Si bien la Coordinadora Democrática postula un recambio constitucional hay opositores que pueden promover salidas violentas.
La oposición acusa a Chávez de querer hacer otra Cuba, pero no es posible dada la coyuntura internacional y al hecho que él expresa a sectores militares y empresariales que quieren atraer inversiones privadas. El gobierno acusa a EEUU de haber promovido golpes, estar queriendo hacer lo mismo que se hizo con Aristide, Allende o Gaitán, o importar paramilitares colombianos para asesinarlo.
Isaac Bigio
Analista Internacional