Galia completa lo que podríamos definir como una brillante trilogía de la Bodega El Regajal, finca enclavada en una reserva natural que ha conseguido situar El Regajal y Las Retamas como dos referencias indiscutibles de la D.O. Vinos de Madrid, y que un buen día (bueno a la vista del resultado) decidió encargar al enólogo francés Jerome Bougnaud que seleccionara las mejores viñas para hacer otro vino, su vino.
El resultado ha sido un vino de autor, en este caso fuera de la D.O. madrileña, que nace de viñedos cultivados desde la tradición vinícola en pequeñas parcelas a lo largo del río Duero, en las provincias de Soria, Burgos y Valladolid. Puro viñedo con 18 meses de barrica de roble francés que llega a la copa, y a la boca, como una fiesta de fruta madura, un vino envolvente con una acidez natural bien integrada.
Galia se nos presenta con elegancia y amplitud, un vino que hace gala de una fuerza contenida, que cuando se abre potencia sus aromas de frutos rojos, los toques de cedro y de canela, que con el reposo nos regala una embriagadora calma. Es otro exponente de esos vinos que mejoran con las añadas y en este 2010, sin duda, se ha superado. Todo tempranillo, todo frescura, tradición de viñas viejas con una delicada labor de orfebrería, este afinado producto de la naturaleza llegará, como siempre, con una producción limitada y a un precio aproximado de 28 euros en tienda.
Mar Villasante