La menstruación continúa siendo un tema estigmatizado en la sociedad española. Así lo demuestra un macroestudio pionero liderado por el Instituto INGENIO, centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universitat Politècnica de València (UPV), que ha analizado las percepciones sociales sobre la menstruación a partir de más de 4.000 testimonios. Los resultados han sido publicados en la revista International Journal for Equity in Health.
La investigación concluye que solo 6 de cada 10 personas consideran normal hablar sobre menstruación, mientras que un 40 % percibe que sigue siendo un tema tabú. Este estigma es más pronunciado entre los grupos de menor edad. Según el estudio, las mujeres postmenopáusicas reportan una mayor aceptación social, en contraste con las generaciones más jóvenes, que siguen experimentando incomodidad, inseguridad e incluso sexualización en torno al ciclo menstrual.
“La menarquía no se vive solo como un cambio biológico, sino como un constructo social que marca el inicio de nuevas restricciones y miradas externas”, explica Rocío Poveda, coautora del estudio. “La forma en que se construye socialmente ese momento puede influir profundamente en la autoestima y en la percepción externa de las jóvenes”, añade.
El estudio destaca la importancia de recibir información clara y práctica desde la primera menstruación. Aquellas personas que contaron con este tipo de orientación se sienten más cómodas hablando del tema y presentan una mayor predisposición a normalizarlo en distintos entornos. En esa línea, Sara Sánchez-López, investigadora principal del proyecto, señala que “los mayores avances se producen cuando se rompen los silencios de género. La capacidad de hablar de menstruación con hombres es un indicador clave de aceptación social y un paso decisivo para desactivar el tabú”.
Uno de los aspectos más relevantes del estudio es el análisis de la representación cultural de la menstruación. Un 79 % de los encuestados afirma que no aparece o lo hace de manera muy marginal en series y películas, mientras que un 73 % indica lo mismo respecto a los libros. La investigación también subraya su escasa visibilidad en medios como la televisión, especialmente en programas de telerrealidad, donde esta omisión se percibe como deliberada.
La publicidad es otro de los frentes criticados por las personas participantes, quienes destacan el uso de metáforas visuales como líquidos azules, purpurina o mujeres siempre sonrientes y activas, ajenas a cualquier malestar. “Estas representaciones, consideradas por las participantes como poco realistas y nada identificables, alimentan la idea de que la menstruación debe embellecerse o higienizarse para ser socialmente aceptable”, explica Sánchez-López.
El estigma menstrual, además de su impacto simbólico, tiene consecuencias concretas en el bienestar emocional y la autoestima, así como en la educación y el acceso a la salud. Un estudio anterior del mismo equipo ya mostraba que solo un 5 % de las personas encuestadas había recibido información práctica en la escuela sobre cómo gestionar el sangrado menstrual. Ahora, esta nueva investigación constata también cómo las creencias negativas pueden ser utilizadas para desacreditar o deslegitimar a las mujeres.
“Los testimonios recogidos entre las 4.000 participantes señalan que, en ocasiones, la menstruación se utiliza para restar valor a sus emociones o a sus argumentos, lo que genera estigmatización y conflicto interpersonal”, destaca Santiago Moll, coautor del estudio.
Sánchez-López apunta que “el estigma limita la presencia de la menstruación en los debates públicos y políticos, frena los avances en la regulación del acceso a productos menstruales, dificulta diagnósticos médicos adecuados y perpetúa mitos por falta de información fiable”.
El estudio ha contado con la participación de la investigadora internacional Dani Barrington, de la University of Western Australia, experta en salud menstrual y activismo, lo que refuerza su dimensión comparativa y su valor en el contexto global del debate sobre equidad menstrual.
Referencia científica:
Sánchez López, S., Barrington, D.J., Poveda Bautista, R. et al. Stigma and silence: the menstrual taboo in Spain. Int J Equity Health 24, 278 (2025). https://doi.org/10.1186/s12939-025-02630-z
Artículo redactado con asistencia de IA (Ref. APA: OpenAI. (2025). ChatGPT (versión 1106 noviembre). OpenAI)
