Agentes de la Policía Nacional han detenido a 29 personas como presuntas responsables de 287 actos vandálicos mediante grafitis sobre trenes y sus instalaciones. Las detenciones, efectuadas en varias provincias —Madrid (18), Málaga (4), Valencia (2), Barcelona (2), Alicante (1), Soria (1) y León (1)—, han sido el resultado de una operación que ha requerido una intensa coordinación interterritorial y entre unidades policiales especializadas.
La investigación, que comenzó en septiembre de 2024 tras recibir numerosas denuncias por daños en infraestructuras ferroviarias en distintas ciudades, ha permitido esclarecer un total de 319 delitos, desglosados en 187 delitos de daños y 32 de desórdenes públicos.
Uno de los aspectos más llamativos del caso es el alto grado de especialización de los implicados. Los arrestados operaban con un método que revela planificación y profesionalidad: “Estudiaban minuciosamente los horarios y frecuencias de los trenes, así como la distancia de frenado una vez activado el freno de emergencia”. Además, disponían de herramientas específicas, llaves maestras y útiles que facilitaban el acceso a zonas restringidas y la ejecución de sus acciones sin ser detectados.
La operación también ha sacado a la luz el uso sistemático de dispositivos de grabación por parte de los grafiteros, quienes registraban sus intervenciones y las difundían posteriormente en redes sociales. Esta práctica les servía no solo para documentar sus actos sino también para ganar notoriedad en determinados círculos, lo que sugiere un componente de autoafirmación y pertenencia al submundo del grafiti urbano.
Madrid, por su densidad de infraestructuras ferroviarias y su carácter de nodo estratégico de comunicaciones, se ha revelado como epicentro de estas acciones. En la Comunidad de Madrid se ha detenido a 18 personas en localidades como San Sebastián de los Reyes, Alcobendas, Torrejón de Ardoz, Galapagar, Boadilla del Monte, Móstoles, Leganés y Getafe. Estos arrestos han permitido esclarecer 220 delitos, con un impacto económico estimado en más de un millón de euros: “El perjuicio económico generado asciende a 1.026.412 euros”.
La movilidad de los investigados ha requerido el despliegue de operaciones específicas en otras comunidades. En Málaga, una investigación de 18 meses ha conducido a la detención de cuatro personas y al esclarecimiento de 48 delitos valorados en 205.728 euros. El modus operandi en esta región incluía encuentros previamente acordados en estaciones rurales y aisladas, como Álora, Antequera, Espeluy o Jabugo, donde los autores aprovechaban las paradas técnicas o los talleres ferroviarios para llevar a cabo sus acciones.
En Asturias se han identificado tres individuos como responsables de cinco delitos, valorados en 25.069 euros. A mediados de mayo, nuevos dispositivos desplegados en diferentes ciudades dieron lugar a otras siete detenciones, esta vez en Valencia, Barcelona, Soria, Orihuela y Ponferrada. En conjunto, se han aclarado 46 delitos de daños más, con una afectación económica de 204.136 euros.
La operación, desarrollada en distintas fases y localizaciones, ha puesto de manifiesto la existencia de una red itinerante y organizada de grafiteros, cuya actividad delictiva transita entre la clandestinidad, la planificación y la ostentación pública mediante canales digitales.
artículo redactado con asistencia de IA (Ref. APA: OpenAI. (2025). ChatGPT (versión 3 junio). OpenAI)