En especial John McEntire, omnipresente productor, pero tampoco Eric Claridge, Sam Prekop o Archer Prewitt parecen haber gozado de mucho tiempo libre. Están aquí con «Oui», una preciosidad de pop refinado, armonías cálidas y elegancia pluscuamperfecta. A fuerza de ser rebuscado, de rastrear minuciosamente en cada uno de sus pasados, si de algún proyecto pretérito bebe THE SEAN AND CAKE es del de The Cocktails, la banda que lideró Archer Prewitt y que ha ido imponiendo su sonido, poco a poco, en este proyecto, quizá enfocando desde la vanguardia más sofisticada el lounge de su ex-grupo. Porque, nadie puede ignorarlo, «Oui» es uno de los discos de pop más evidente del año, con la espaciosa producción de McEntire, el sonido a trópico urbano al que parecen arrimarse en cada disco (+trópico en Chicago?) y canciones que son garantía del buen gusto. Lo de menos, en este caso, es el proceso de grabación o las tecnologías empleadas. Muy refinado, bossa futurista, con teclados preciosos, la siempre muy especial voz de Sam Prekop y canciones, como corresponde a un buen disco de pop, sublimes (en especial «Two dolphins» y «The colony room», que no deja de recordarme a los inicios de Butterfly Child). ¨He dicho que ‘ste es un disco pop?.
THE SEA AND CAKE
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