Michael Krassner es uno de esos tipos. Además tiene el don de la sociabilidad y no duda en formar distintas alineaciones para su BOXHEAD ENSEMBLE, proyecto instrumental que ya va por su tercer paso con «Two Brothers». A la formación oficial (Jessica Billey, Ryan Hembrey, Glenn Kotche, Fred Lonberg-Holm, Scott Tuma y el propio Krassner) se le une en esta ocasión reconocidas luminarias de la independencia como Jeff Parker, Mick Turner, Jeff Tweedy o Jim White, para un tercer proyecto que esta vez no parece tener ninguna excusa en su embrión (ni documental ni gira sobre la que basarse) pero que aún así reincide en un aislacionismo orquestado con forma de gelatina glacial. Frío, abstracto y casi inerte, otro de esos modelos necesarios para entender lo que será la música clásica del mañana, nuevas formas que los academicistas rechazan y los amantes de lo alternativo no entienden. En tierra de nadie, el último lugar donde algunos irían, el único paraíso del que muchos jamás sabrán nada.
Jesús Castillo