Quince mil trabajadores al servicio del Estado mexicano marcharon en la ciudad de México para exigir el pago del llamado «bono sexenal», que representaría para el gobierno federal un gasto de 560 mil dólares. Como su nombre lo indica, el estado entregaba ese bono a los trabajadores, cada seis años.
El líder de los trabajadores, Joel Ayala, hizo un llamado al gobierno de Ernesto Zedillo para que resuelva lo más pronto posible la demanda de compensación sexenal de sus representados. Ayala dijo que así se evitará que el conflicto se desborde y de que las movilizaciones de los empleados federales deriven en paro nacional.
Un grupo de 16 sindicatos, encabezados por las secretarías de Agricultura y Desarrollo Social habían convocado desde el viernes a la marcha en desafío a su dirigencia. En ese tiempo, Joel Ayala se encontraba negociando con el gobierno federal, por los que los sindicalistas lo calificaron de traidor.
Las marchas y manifestaciones iniciadas en la ciudad de M’xico se extendieron el lunes a m s de 40 ciudades del interior del pa¡s. All¡, los bur¢cratas tambi’n salieron a las calles para exigir el pago del bono sexenal, 90 d¡as de aguinaldo y en algunos casos para demandar la liberaci¢n de plazas congeladas.
Los bajos salarios, p’simas condiciones laborales, hartazgo contra sus l¡deres sindicales y la derrota del Partido Revolucionario Institucional en las elecciones federales, fueron los detonantes de las manifestaciones de los denominados bur¢cratas. Los trabajadores estatales reclaman el pago que cada seis a_os hab¡an recibido de parte del Estado. (Mx/QR/Gr-Au/Cs-Pe/pt).
Pedro Ortega Lugo