El viernes 15, ante más de 200 empresarios, el Secretario de la Unión Industrial Argentina (UIA) José Luis de Mendiguren advirtió que la política de apertura indiscriminada de la economía está aniquilando a las empresas argentina, afirmando que es prácticamente imposible producir en el país y le exigió al Gobierno de Fernando de la Rúa un cambio en el rumbo económico.
En su disertación en la jornada ôCorrupción e Indiferencia: La guerra no declarada contra la industria y el trabajo nacionalö, el dirigente empresarial señaló que ôseguir abriendo la economía con los costos actuales es lisa y llanamente aniquilar a las empresas nacionalesö.
De Mendiguren, criticó el actual modelo económico y afirmó que se debía dar ôun profundo viraje a lo que hemos conseguido hasta ahora, que signifique un salto al futuro, no al pasado, porque así no podemos seguirö.
El Secretario de la central empresarial y uno de los firmes postulantes a presidir la UIA el año entrante, aseguró que Argentina precisa «inversiones de riesgo en los sectores productivos». En tal sentido, orient¢ su propuesta a una «sustituci¢n eficiente de importaciones, que permitir equilibrar la balanza comercial» del pa¡s.
Luego de dos lustros de apertura econ¢mica, producir en Argentina es pr cticamente imposible «ya que no se ha logrado una econom¡a competitiva», remarc¢ el empresario.
Record¢, a tal efecto que los pilares en que se sustent¢ el Plan de Convertibilidad -que desde abril de 1991 llev¢ a que un peso argentino equivaliera a un d¢lar- eran tres: una deflaci¢n de precios del 25%, la imposibilidad de un alza en las tarifas y el control del d’ficit fiscal.
«Los sectores que estuvimos sujetos a la apertura cumplimos con no incrementar los precios, pero los precios de los bienes transables» hab¡an experimentado un incremento -hasta la fecha- del 9%.
Para destacar que uno de los pilares de la normativa, la deflaci¢n, no se cumpli¢ puso como ejemplo al sector de los servicios poblicos. De Mendiguren, precis¢ que como el mismo «no compet¡a con el exterior» en lugar de haberse deflacionado, produjo una suba en sus precios de «un 104% desde el inicio de la Convertibilidad».
Por su parte, destac¢ -bastante enojado- que no era preciso que ciertos guroes de la econom¡a vinieran a explicar que con la pol¡tica de apertura, «hubo claros ganadores y claros perdedores».
Al tiempo, remarc¢ que desde 1991 el sector de la industria no hab¡a hecho «otra cosa que subsidiar» de manera indirecta a la importaci¢n, como resultado del excesivo incremento «del costo argentino» y de resultas de ello se destruy¢ «el empleo interno».
Para que no quedaran dudas, el Secretario de la UIA, se_al¢ que la onica rentabilidad de magnitud era la de los servicios poblicos privatizados, pero habida cuenta que los mismos «quedaron en manos extranjeras, esa utilidad directamente se gira a utilidades» provocando un mayor endeudamiento del pa¡s.
Tras los cuestionamientos, De Mendiguren precis¢ cuales ser¡an las medidas que se deber¡an adoptar para salir del estancamiento en el que se halla la econom¡a nacional. En ese sentido, le reclam¢ al Gobierno la creaci¢n -de manera urgente- de un seguro de desempleo para los jefes de familia desocupados, la modificaci¢n de la pol¡tica de comercio exterior y una mejora en los precios relativos de los bienes transables.
Cabe destacar que la primera de las propuestas est en consonancia con lo dise_ado por la opositora Central de los Trabajadores Argentinos, que a trav’s de la recogida de firmas impulsa que el Parlamento establezca un seguro de desempleo.
Alberto Bastia
Jefe Corresponsal¡as Informativos.Net en Am’rica Latina