Automáticamente nuestro cerebro volvió años atrás. Marzo de 1992, bomba contra la Embajada Israel. Decenas de muertos y heridos sembrados en la calle Arroyo, en el residencial barrio porteño de la Recoleta. Y en julio de 1994, fue volada la sede de la AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina). Ochenta y seis muertos y decenas de heridos quedaron tendidos sobre la calle Pasteur al 600, en el Once, el barrio por excelencia de la colectividad judía. Ambos atentados terroristas fueron atribuidos al fundamentalismo musulmán.
No había pasado más de media hora de los atentados terroristas contra la sede del Centro de Comercio Mundial (WTC, por sus siglas en inglés) y la legación de la Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires era evacuada por completo. Lo mismo ocurría con la nueva sede de la AMIA, reconstruida a metros de su anterior sitio.
A lo largo de toda este trágico martes, la dirigencia política argentina, funcionarios gubernamentales, representantes diplomáticos y dignatarios de la Iglesia Católica, repudiaron los luctuosos hechos acaecidos en el pa¡s del norte, que de acuerdo a la versi¢n oficial se habr¡a cobrado m s de 10 mil vidas y un nomero de heridos que superan las 800 personas.
El doctor Fernando de la Roa, Jefe de Estado, indic¢ que «sabemos el dolor que significan estos atentados terroristas por los que sufrimos en la Embajada de Israel y la AMIA», y «hacemos una invocaci¢n a la paz y un repudio a la violencia», agreg¢.
En el mismo sentido se manifestaron dos gobernadores de la oposici¢n peronista.
Jos’ Manuel de la Sota, titular del Ejecutivo de la provincia de C¢rdoba, destac¢ que el pueblo norteamericano «fue v¡ctima de un salvaje y cobarde ataque terrorista, que deja a todos los pueblos libres del mundo acongojados y doloridos».
Por su parte, su par de la provincia de Buenos Aires, Carlos Federico Ruckauf, puntualiz¢ que era preciso «movilizar todas las estructuras de seguridad y de defensa, y estar alertas porque nadie sabe c¢mo puede evolucionar un hecho de esta magnitud».
En tanto, para el titular de la Conferencia Episcopal Argentina, Monse_or Estanislao Karlic, «esta es una p’sima noticia. Qu’ dolor!». Y acentu¢, que «todos los pueblos tienen cada d¡a el deber de construir la paz, espero que no haya represalias ni m s muerte».
Mientras tanto, James Walsh, Embajador norteamericano en el pa¡s, explic¢ que hab¡a decidido cerrar la representaci¢n por razones de seguridad, «no porque tengamos ninguna noticia en particular con respecto a la situaci¢n ac en la Argentina sino por precauci¢n, una precauci¢n que probablemente est’n tomando mis compatriotas en otras Embajadas del mundo».
Quien despej¢ todo tipo de dudas de implicancia del pueblo palestino en los atentados fue el representante de la Misi¢n de Palestina en Buenos Aires, Embajador Suhail Hani Daher Akel.
«No tenemos dentro de nuestro pueblo ni de nuestro pa¡s grupos terroristas, ni los podemos aceptar», subray¢. Acto seguido, a_adi¢: «Estamos en contra del terrorismo, somos v¡ctimas del terrorismo israel¡». Concluy¢, recalcando que «es una injusticia que r pidamente se acuse al pueblo palestino».
Cuando la noche ca¡a sobre la capital de la Argentina, el Subsecretario de Comunicaci¢n del Gobierno, el radical Juan Pablo Baylac, en di logo telef¢nico con Informativos.Net, detallaba que en la Naci¢n sudamericana «lo convencional (en cuanto a la seguridad) est disponible y se advierte tranquilidad en lo concerniente a un posible atentado».
En tal sentido, precisaba que se hab¡an reforzado los dispositivos de seguridad «en blancos posibles (edificios de la comunidad jud¡a y musulmana) en los aeropuertos» y en la frontera comon con el Brasil y Paraguay, mbito que se estima por el cual habr¡an ingresado -en el pasado- quienes participaron en los atentados a la embajada israel¡ y a la mutual de esa colectividad.
En otro tramo de sus declaraciones, el portavoz gubernamental exterioriz¢ que «el Gobierno mostr¢ consternaci¢n, solidaridad con el pueblo y Gobierno norteamericano y repudi¢ absolutamente con el calificativo m s fuerte al terrorismo».
Por oltimo, Baylac, record¢ que hoy a las 16:00 -hora argentina- en el Obelisco, en la porte_a Plaza de la Repoblica, miembros de distintas confesiones religiosas orar n por la paz en el mundo, y que en la ceremonia estar presente el Presidente De la Roa y los integrantes de su Gabinete.