Cuando todavía estaba en silencio el recinto de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, las operaciones electrónicas ûcon incipientes órdenes de venta- vaticinaban una álgida rueda.
Por su parte, los movimientos de los títulos ûde corto plazo- de la deuda externa argentina también se caían, pero no con la magnitud de los 24 papeles del panel del MerVal.
Con un volumen de 18,4 millones de pesos (o dólares) y un total de 61 acciones cotizadas, la fuerte toma de ganancias determinó 4 alzas, 56 bajas y 1 que se mantuvo sin cambios.
En ese marco, el MerVal mermó 4,06%, cerrando en 242,20 puntos. En cuatro ruedas, el índice bursátil acumuló una pérdida de -8.96%.
Renault lideró el pelotón de las sufridas compañías, con el 13,04%. Un peldaño atrás se ubicó el papel del grupo inversor IRSA ûdel financista húngaro George Soros- con 12,61%.
Y otra jornada negra para las empresas de origen español que cotizan en el parquet porteño. El exiguo 0,49% de mejora en Telefónica quedó empalidecido por el alud del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria / Banco Franc’s -8,44%- y el desmoronamiento de la petrolera Repsol, 3,78%.
En el escabroso terreno del ¡ndice de riesgo pa¡s, que mensura la confianza de los inversores en los t¡tulos de deuda de las econom¡as sumergidas, subi¢ 1,3%, quedando en 1612 puntos b sicos.
Luego de dos d¡as en que el Embi+ (segon sus siglas en ingl’s) el alza se debi¢ a que su t¡tulo referencial -el «Global 2008»- perdi¢ 2,73%, con respecto al mi’rcoles 19.
Pues bien, a nueve d¡as de los atentados terroristas que sacudieron -el martes 11- a los Estados Unidos, los inversores siguen atentos a lo que ser¡a una inminente represalia que desatar¡a la administraci¢n del republicano George W. Bush sobre Afganist n, refugio -a juicio del Presidente norteamericano- del millonario saudita Osama Bin Laden, presunto autor intelectual de los mort¡feros ataques. Porque en ese mundo globalizado, un simple estornudo puede acarrear un fuerte resfr¡o en el globo.