Rangel afirmó que para el gobierno es un tema fundamental el esclarecimiento de las muertes del 11 de abril, «y le damos más importancia de la que le da la oposición».
«Nosotros estamos interesados en que se esclarezca todo, nosotros no protegemos asesinos. Si hay asesinos del lado del gobierno que sean castigados, pero si hay del lado de la oposición que sean castigados también», aseveró.
El vicepresidente señaló que el gobierno es el que impulsa la formación de una Comisión de la Verdad: «no tenemos ningún inconveniente en que se investigue hasta las últimas consecuencias», añadió.
Rangel dijo que el problema no es de caras, sino de posiciones. «Yo creo que hay un remozamiento importante del gabinete, una reubicación de personas en lugares donde puede cumplir mejor su trabajo».
Expresó que siempre habrá críticas sobre un cambio de gabinete. «Lo importante es que se estaban pidiendo cambios y se produjeron, por ejemplo, en el caso de los ministerios de Finanzas y Planificación».
Rangel dijo que ni la central empresaria ni la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) están excluidas del diálogo nacional lanzado desde el gobierno, y señaló que la primera dijo que si no participaba la CTV no asistía a la comisión.
«Hay muchas organizaciones de la CTV que están presentes en la comisión. Lo que no está presente es la directiva, porque sobre ellos existe un problema legal que le corresponde resolver al Consejo Nacional Electoral», expresó.
«Hasta ahora el único que ha utilizado la palabra ectificares el Presidente. Ningún sector de la oposición -a pesar de su inmensa responsabilidad en los hechos de violencia- ha utilizado la palabra de diálogo, entendimiento y rectificación», destacó.
Agregó que «este es un proceso difícil, hay que tener paciencia. Poco a poco la gente se irá dando cuenta que hay sinceridad», dijo.
Rangel resaltó que están respondiendo muchos sectores de la sociedad, incluso muchos que estaban muy radicalizados antes del 11 de abril.
«Ellos ya comenzaron a entender que el diálogo no tiene sustituto, que la única alternativa en Venezuela es dialogar, porque el resto es la guerra civil», expresó.
Dijo que incluso el Presidente Chávez dijo que todo se puede debatir -incluso reformas a la propia Constitución- pero en el marco de la Constitución y el diálogo.
Con respeto a la relación sobre Estados Unidos, dijo que Venezuela tiene una posición muy clara. «Somos un proveedor muy importante de petróleo, tenemos una relación comercial muy intensa e históricamente hemos tenido excelentes relaciones», añadió.
Indicó que ha habido algunas diferencias en los últimos tiempos, «pero nosotros no magnificamos esas diferencias».
«Incluso le hemos dado un tratamiento muy discreto a las informaciones que hablan de la presunta participación de miembros de la misión estadounidense en Caracas», dijo.
Rangel dijo que para el gobierno «lo más importante es la relación; dejamos de lado la anécdota y queremos fortalecer esa relación».
Sobre la relación con Colombia, indicó que «nunca hemos dejado de lado al Presidente (Andrés) Pastrana y la institución colombiana al momento de asumir el tema de la violencia».
En cuanto a disuadir a los sectores que piensan que hay connivencia entre el gobierno venezolano y la guerrilla, dijo que eso «es muy difícil, porque es una propaganda inducida para perturbar la relación entre Venezuela y Colombia, y para que esto rebote en Washington».
«Debo decir con claridad que nuestra posición es inequívoca con la guerrilla colombiana. Cualquier presencia de ella será inmediatamente neutralizada y repelida por las Fuerzas Armadas», manifestó.
Aram
