Se trata de una materia en la que se estudiarán la filosofía e historia de las religiones, como alternativa a la religión en la educación primaria y secundaria.
El anuncio lo ha hecho público el secretario de estado de educación, Jorge Fernández. Con esta medida, se obligará a los escolares a estudiar la cultura de las diferentes religiones y se tratará, según el Gobierno, de inculcar la tolerancia hacia otras religiones.
El problema surgirá cuando la medida sea discutida en el parlamento, pues es más que previsible que los partidos de la oposición recuerden al Partido popular que España es un estado laico y que, como tal, no debe de inculcar obligatoriamente en los estudiantes ningún tipo de conocimiento religioso, sino sólo ofrecerlo como una opción voluntaria dentro de las más diversas asignaturaas.