«El vaquilla» salió el jueves de la semana pasada a sus clases para sacarse el carnet de conducir, tal como era costumbre. Se había ganado la confianza de las autoridades penitenciarias por su buen comportamiento, tras haber representado un mito en los años setenta, en que fue considerado uno de los delincuentes más peligrosos del país.
Juan José Moreno Cuenca tomó su clase, pero decidió no volver a la prisión, por lo que el juez dictó un auto de búsqueda y captura contra él. El preso, que iba a disfrutar de un régimen penitenciario más permisivo y abierto en los próximos meses, ha estado en paradero desconocido hasta ayer por la tarde, en que fue detenido.
Las primeras noticias apuntaban al principio que él mismo llamó por teléfono a las autoridades para entregarse. Pero en realidad fue la policía quien lo sorprendi¦ño, conduciendo un coche deportivo robado, en compañía de otro delincuente y de su sobrino, que está siguiendo sus malos pasos.
Segon los psic¢logos, «El vaquilla» necesitaba recuperar su popularidad y protagonismo y por esto ha cometido esta evasi¢n pasajera. Ahora la duda est en saber si algon d¡a este hombre de 36 a_os, que ha pasado la mitad de su vida (18) en prisi¢n, podr reintegrarse socialmente.