Este país que es la primera potencia militar y económica del mundo, se sigue negando a la creación de un Tribunal Penal Internacional. La creación fue aprobada por 120 países reunidos en Roma hace un año. Este Tribunal tendría la potestad de juzgar genocidios y graves crímenes de guerra. Su formación ha sido ratificado ante las Naciones Unidas por cuatro países, incluido Italia.
Estados Unidos es el solitario país que aún se resiste a firmar la creación del Tribunal, por considerarlo peligroso para sus intereses. Políticos estadounidenses dicen que la política militar de su país puede ser enjuiciada permanentemente. El senador Jesse Helms, del conservador Partido Republicano y creador de la ley Helms-Burton contra Cuba, señala que el Tribunal murió el mismo día en que se hizo la propuesta de su creación.
Fue una coalición internacional de Organizaciones no Gubernamentales de defensa de los derechos humanos quien realizó la propuesta de crear este Tribunal Penal Internacional. (Eu/IP/Oi/Pl/mc)
EE.UU SE OPONE A LA CREACIÓN DEL TRIBUNAL PENAL INTERNACIONAL
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