25 personas han resultado muertas en Timor oriental, tras un ataque a un establecimiento religioso en Dili, – capital de Timor -, según ha declarado un sacerdote.
El hotel vecino, donde se encontraban miembros de la ONU, periodistas y diplomáticos, ha resultado parcialmente incendiado. El edificio de la fundación para los derechos humanos y la justicia ha sido igualmente atacado. Al mismo tiempo, grupos de personas que se encontraban reunidas en al menos dos puntos de la capital de Timor, han sido tiroteados.
Uno de los pocos periodistas que todavía permanece en Timor, ha manifestado que los milicianos han disparado sobre un grupo de 1500 personas, que se amontonaban junto a la puerta del cuartel general de las naciones Unidas para pedir protección.
Según la IFET-OP ( una de las más importantes asociaciones que han llegado a Timor para supervisar las elecciones), el ejército y la policía se dedican a sembrar el terror entre la población. La violencia se ha extendido ya por todos los puntos del territorio.
EL TERROR SE HA INSTALADO EN TIMOR
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