Después de casi dos meses de bombardeos a Yugoslavia por parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, OTAN, los grandes ganadores son los fabricantes de armas estadounidenses.
El Pentágono anunció un incremento de su presupuesto en 10 mil millones de dólares, de tal manera que los militares estadounidenses contarán con un total de 53 mil millones de dólares.
El Pentágono usó la guerra contra Yugoslavia como un laboratorio para determinar qué armas están obsoletas y que deben ser cambiadas por otras más modernas y mortíferas, por supuesto.
Para empezar, los fabricantes de armas ya tienen asegurado la compra de miles de misiles ya que Estados Unidos gastan cientos de ellos cada día en su guerra contra Yugoslavia. También está presente el bombardeo semanal a Irak.
La empresa Raytheon, productora de los misiles Tomahawks anunció que este año llegarán a producir unos 60 mil de dichos misiles. La empresa estadounidense «Use missil systems» fabricante de los misiles Tomahawks BGM-109, también recibirá una buena suma de dinero por su producto.
Cada uno de esos misiles cuesta medio millón de dólares y resultaron efectivos por ser dirigidos por satélite para impactar en el blanco. Con ese sistema los atacantes no deben preocuparse por el mal tiempo.
¿Qué se podría hacer con los 10 mil millones de dólares correspondientes al incremento del presupuesto estadounidense para la guerra?. Se puede reconstruir totalmente los daños causados por el huracán Mitch en toda Centroamérica, o inmunizar a la totalidad de los niños pobres del mundo de enfermedades infecto-contagiosas. (Eu/Cl-Yz/Mt/Pe/mc)
FABRICANTES DE ARMAS: GRANDES BENEFICIADOS DEL CONFLICTO YUGOSLAVO
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