Kosovo logrará su independencia, pero no tan pronto como quieren los kosovares. Al menos, esta es la opinión de algunos analistas de relaciones internacionales españoles y extranjeros. De momento, Kosovo se convertirá en un protectorado, cuya seguridad estará garantizada por fuerzas de intervanción de la NATO o de la ONU, en función de lo que a partir de ahora ocurre en el interior de Yugoeslavia.
Slobodan Milosevic se resiste a dejar el poder. Sabe que si cae su régimen, tendrá que huir del país y refugiarse en Sudáfrica o alguna república islámica, como Irak. Pero mientras ocupe la presidencia del Gobierno yugoeslavo ni la ONU ni la NATO podrán dejar de proteger Kosovo. Durante este tiempo (que puede durar varios años), la región yugoeslava kosovar se irá poco a poco convirtiendo en un protectorado internacional. No pagará impuestos ni dependerá para nada de Belgrado.
Los jóvenes kosovares también dejarán de servir a Serbia como hacían hasta ahora. En las negociaciones llevadas a cabo para lograr la paz se ha acordado que los kosovares no pueden ser armados y militar en las filas de un Ej’rcito como el serbio, que se ha dedicado a masacrar a sus familias y amigos. Una vez estabilizada la situaci¢n en los Balcanes, Kosovo podr optar por su libertad e independencia como cualquier otro Estado.