238
La policía estima que las redes de prestamistas de dinero mueven cada año unos 344.000 millones de pesetas. Se calcula que existen más de ocho mil usureros en este país, que chupan la sangre de millares de ciudadanos, la mayoría comerciantes, que piden créditos al margen del sistema bancario oficial y pagan por el préstamo recibido unos intereses desorbitados.
Entre los usureros más importantes detenidos en Italia están el hermano del cardenal de Nápoles y el director de una agencia del Banco de Nápoles. Cobraban intereses del cuatrocientos por ciento y exigían talones en blanco como garantía de cobro.