Si el 31 de diciembre se diera por concluido el periodo de sesiones, para que coincidieran las elecciones en domingo Aznar debería convocarlas para el 27 de febrero, toda vez que la ley electoral indica que deben transcurrir 54 días desde el anuncio oficial.
Si el presidente optase por agotar la legislatura (el mandato de los actuales parlamentarios expira el 3 de marzo del 2000), el decreto de convocatoria de las elecciones debería expedirse entonces 25 días antes del fin del mandato, es decir, el 8 de febrero, y se publicaría en el Boletín Oficial del Estado (BOE) un día después.
Es aquí donde surgen interpretaciones distintas sobre si se cuenta a partir de la expedición del decreto o de su publicación en el BOE y, en función de ello, la fecha tope de los comicios sería el sábado 1 o el domingo 2 de abril. Fuentes de los grupos parlamentarios se muestran convencidas de que Aznar no va a exponerse a que pueda haber dudas y, por tanto, decidirá que sean como máximo el domingo anterior, el 26 de marzo.
