La justicia parisina ha anunciado que ô no ha lugarö a las acusaciones que pesaban sobre nueve fotógrafos y un motorista de prensa, sobre la muerte de Lady Di y su amigo Dodi al-Fayed, en la madrugada del 30 al 31 de agosto de 1997 en París.
Según la investigación, no existen cargos suficientes para enviar ante un tribunal correccional a esas diez personas, que han estado acusadas de homicidio y heridas involuntarios y no asistencia a persona en peligro.
Tras una larga investigación, la velocidad y el alcohol parecen las causas del accidente, ya que los análisis toxicológicos del conductor del mercedes en el que viajaba la pareja, Henri Paul, han revelado que este se encontraba en estado de embriaguez durante el accidente, con una tasa de 1,75 û 1,80 de alcohol por litro de sangre. Una tasa más de tres veces mayor a la norma legal. Paul había tomado también antidepresivos.
Los expertos han asegurado también que el Mercedes iba a una velocidad muy superior a la permitida en el puente. La decisi¢n de la justicia no ha provocado ningon comentario entre los allegados a la princesa de Gales y tampoco entre los familiares y amigos de Dodi.
As¡ pues, carpetazo al caso Lady Di y ningon dato nuevo para adjuntar a dossier.
LOS JUECES PARISINOS NO JUZGAR-N A LOS FOTÓGRAFOS INCULPADOS EN EL CASO LADY DI
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