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Las autoridades de Mauritania han decidido el lunes reenviar a todos los cooperantes de la asistencia militar francesa a su país, así como instaurar la obligatoriedad de utilización de un visado de entrada para todos aquellos franceses que deseen entrar en Mauritania, según ha anunciado una fuente próxima al gobierno de Nuakchott.
Mauritania ha decidido de la misma manera, ordenar a todos los militares que se encuentren en territorio francés, el regreso a su país.
Esta decisión ha sido tomada tras la inculpación por un tribunal de Montpelier, del capitán mauritano Ely Ould Dha por crímenes de tortura, mientras efectuaba un curso de perfeccionamiento en un centro de estudios militares de la ciudad.
