La revista Las Capullanas hablo con Moisés Lemlij sobre la identidad de Género. El especialista sostiene que la homofobia y el machismo son dos procesos diferentes.
– ¿Cuál es la diferencia entre sexo y género?
El sexo es cromosomial y físico, cada ser humano tiene «XX», en cuyo caso es una hembra, y «XY» en cuyo caso es varón. El género es la representación mental del sexo, y para construir el género, al varón le corresponde el género masculino, a la hembra el género femenino. Se hace una amalgama entre lo biológico y lo familiar, cultural, en donde se incorpora al género una mezcla de las características anatómicas y lo que uno va recogiendo del mundo. Parte de lo que uno incorpora a la identidad de género no es solamente el patrón cultural, sino también pedacitos del otro género. Entonces cada hombre tiene pedazos mayoritarios de masculino y pedacitos de femenino, igual ocurre en la mujer.
– ¿Cómo entender entonces el machismo?
Hay ciertos tipos de patrones culturales que son la exageraci¢n de un grupo de rasgos. El machismo existe cuando se contrasta con otros patrones culturales, donde eso que uno hace, y siente y c¢mo se porta con las mujeres, es visto como negativo. En un pa¡s de machistas nadie sabe que lo son. En los pa¡ses rabes muy tradicionales las mujeres tienen que usar velo, y los hombres son los onicos que pueden saber leer, y sin embargo eso no se llama machismo, porque el machismo se asume como una caracter¡sticas muy particular latinoamericana. Pero son estereotipos culturales que tienen que ver, por un lado con la absoluta denigraci¢n de la mujer, y por otro su absoluta idealizaci¢n.
– Algunos investigadores se_alan que para acabar con la iniquidad en la relaci¢n hombre – mujer, se tiene que ver m s all de g’nero, o en todo caso eliminar esta concepci¢n de g’nero que desfavorece a la mujer. ¨Cu l es su posici¢n al respecto?
Eso es tapar el sol con un dedo, hoy en el mundo el sexo y el g’nero importan, como importa la raza, el dinero, el pa¡s. Tenemos los mismos derechos, pero igual hay una diferencia entre ser una mujer inteligente en Afganist n, y ser una mujer inteligente en Nueva York; un negro en un sitio es una cosa y Mandela es otra. En cualquier trabajo las relaciones de g’nero existen, uno tiene que replantearlas pero no negarlas, es un nuevo contrato social que uno tiene que hacer, pero si es que uno va a decir no existe la diferencia, entonces las diferencias van a quedar. S¢lo el reconocimiento de la realidad es lo que permite la reformulaci¢n de la relaci¢n.
– +En todo caso qu’ tan dif¡cil es replantear estas concepciones de g’nero, c¢mo trabajar para este cambio?
Estas cuotas pol¡ticas, a pesar que en alguna forma son acusadas de antidemocr ticas, son una medida interesante temporalmente. Tiene que favorecerse activamente a los grupos minoritarios. Es una batalla de muchos frentes, en educaci¢n, en defensa de la cultura. En todas partes hay esta divisi¢n pero creo que si se usa la tecnolog¡a adecuadamente, se van a producir los cambios de relaciones que a veces no son necesariamente los m s favorables, porque el aumento de la autonom¡a econ¢mica de la mujer tiene una incidencia sobre el divorcio.
– Otra de las caracter¡sticas se_aladas del machismo es la homofobia, +est de acuerdo?
No. Son cosas aut¢nomas. La homofobia tiene su propia din mica. De alguna forma, algunos acusan al machismo como una defensa contra la homosexualidad, que son hiper machos para defenderse de sus sentimientos homosexuales, eso es algo que se ha planteado. Sin embargo, a m¡ me da la impresi¢n de que son din micas aut¢nomas. El machismo, m s que una defensa contra la homosexualidad, es una escisi¢n entre una madre absolutamente idealizada y una madre absolutamente denigrada, entre la mujer maravillosa pura, virgen, santa, y las otras que son las putas.
– Con respecto a la forma c¢mo se estructura la hombr¡a, se menciona que los varones son continuamente retados a ser m s fuertes para hacerse m s hombres…
Est bastante claro que la identidad de g’nero al a_o y medio ya est formada y b sicamente deber¡a ser inmodificable. Los estudios indican que c¢mo a uno lo tratan, y la constituci¢n anat¢mica, determinan la identidad de g’nero. Por ejemplo, si un var¢n tiene un defecto anat¢mico en los genitales y lo tratan como una ni_ita, tendr una identidad femenina, y si lo operan despu’s, simplemente acaba suicid ndose o loque ndose. Uno tiene que seguir la identidad de g’nero y no de sexo. O sea que la identidad adjudicada es mucho m s potente que la identidad corporal, cromosomial. A los dos a_os ya la identidad es inmodificable en t’rminos generales. Esta identidad b sica, var¢n- masculino, hembra- femenino va ir desarroll ndose de acuerdo a la cultura local.
– ¨C¢mo entender esta violencia contra la mujer, existe por parte del var¢n alguna predisposici¢n a ser m s agresivos?
Esto es una aleaci¢n, una amalgama entre gen’tica y cultura. Hay cosas que son inevitables, son los vericuetos de la evoluci¢n de la especie. Los hombres viven entre 5 y 8 a_os menos que las mujeres, su pico sexual es a los 17 a_os en el var¢n; la mujer vive m s que el hombre, su pico sexual es entre los 35 y 40. La mujer puede tener hijos tan s¢lo durante su periodo de menstruaci¢n, y los hombres pueden tener hijos hasta antes de morirse. La agresi¢n se dirige a lo m s cercano y lo m s vulnerable, y viene de una tradici¢n cultural, esta dicotom¡a entre mam y las otras es el origen del abuso.