Todos los partidos de la oposición española han expresado su rechazo al proyecto del gobierno para reformar la Ley de Extranjería. Incluso aquellos como Convergencia y Unión, partido que gobierna en Catalunya y que suele votar proyectos gubernamentales, ha tomado distancia del texto presentado por el Partido Popular.
Los grupos de la oposición presentaron unas 300 enmiendas al proyecto. La mayoría de ellas tiende a la defensa de los derechos fundamentales de los inmigrantes irregulares.
El Partido Socialista argumenta que negar los derechos de asociación o de huelga a ese colectivo es inconstitucional. También vulnera – dicen- los convenios de la Organización Internacional del Trabajo.
Las demandas de la oposición cuentan con el aval del Consejo General del Poder Judicial. En su informe sobre el proyecto expone «su preocupación por el intento de privar a los extranjeros de los derechos de asociación, reunión, manifestación, libertad sindical y huelga». (Euro/QR/Ppo-Pno/Pb-Cs/ap)
Carlos Iaquinandi Castro