Cerca de cincuenta mil empleados públicos no irán este jueves a su trabajo y con ello, llegará a su clímax la cadena de paros escalonados que se inició la semana pasada. Al centro del conflicto está el aumento salarial del 15.5 por ciento que piden los obreros y la intransigencia de la patronal que solo ofrece el nueve por ciento.
Desde Junio pasado, el Sindicato de Trabajadores de Servicios dijo a su empleador que si el nuevo contrato no estaba firmado para fines de septiembre, habría huelga. Sin embargo, las autoridades no hicieron caso.
El gobierno del condado afirma no tener fondos para satisfacer las demandas del gremio, mientras que los trabajadores argumentan que la economía nacional y estatal gozan de un boom económico histórico.
Mientras tanto, los huelguistas de los tres sindicatos de obreros de la Central del transporte Urbano de Los Angeles iniciaron su día 25 sin presentarse a sus puestos de labores, a pesar de haber recibido un ultimátum de la patronal. Los da_os ocasionados por el paro ascienden a m s de 50 millones de d¢lares y los m s afectados siguen siendo los inmigrantes latinos, los jubilados y blancos pobres. (Eu/QR/Po/Cs/mc)
Francisco Vel zquez