Drunken Fish
tPuede que el lo-fi sea una situación económica más que un estilo, pero en manos de algunos de músicos es una forma de arte como otra cualquiera. De eso sabe mucho ROY MONTGOMERY, un neozelandés vecino de Nueva York que desde mediados de los ochenta viene intrigando al mundo con su música, muchas veces grabada únicamente con un cuatro pistas (en portada) desde su domicilio (el título). «324 E. 13th Street #7» recopila una serie de singles así como un conjunto de inéditos hasta la fecha, todas ellas grabaciones comprendidas entre 1985 y 1995, con una presentación modesta pero ejemplar a la hora de suministrar toda la información deseable en estos casos. Con escasas ayudas (Barbara Manning en «German sister»), ROY MONTGOMERY conecta sus trastos (guitarras, teclados), enjuaga su voz grave y da pistoletazo a una rutina preciosa: canciones íntimas, en algunos casos más eléctricas («Something else again») que en otros, como poseídas por un pétreo minimalismo oscuro, sentidas y personales, solitarias, tanto en la grabaci¢n del autor como en el mejor estado para llegar al oyente. Con cierto virtuosismo bien entendido en las guitarras, ROY MONTGOMERY demuestra que la falta de medios nunca es excusa para quedarse callado. Canciones de sobremesa desde el estudio de tu dormitorio. t t
