Puede unir las dos funciones que desarrolla en su país. La de sindicalista, como Secretaria General del Sindicato de Comercio, Gastronómicos y Servicios y diputada, por su provincia, en la Asamblea Popular. Se llama Irma Teresa Consuegra Viamontes. Visitó Argentina -conjuntamente con Víctor Martel, miembro del Directorio Nacional de su gremio- invitada por el Secretario General del Sindicato de Empleados de Comercio de la zona oeste de la Provincia de Buenos Aires, Juan Carlos Ledesma.
Instantes previos a la cena, con la que fue homenajeada dialogó con Informativos.Net.
En este mundo globalizado, donde las inversiones ûen muchas ocasiones de dudoso origen- viajan de país en país, le consultamos si las mismas no implicaban que se extraviara el espíritu transformador que en su nación lleva ya más de cuatro décadas.
ôCon la inversión extranjera no se pierde el espíritu de la lucha de Cuba, ni tampoco se pierde nada de la revolución. (…) Quisiera decirle que en Cuba, por ejemplo, hemos decidido que hay servicios y conquistas que no se van a negociar y donde no habr nunca inversi¢n. Le puedo poner de ejemplo, la salud, es un tema important¡simo, la producci¢n de f rmacos eso s¡ se comercializa, porque eso no tiene ningon tipo de problema», precis¢ la visitante.
Consuegra Viamontes, nacida hace 30 a_os en la provincia de Camag_ey, se_al¢ que -en lo referente a la salud- tambi’n comercializan el equipamiento de alta tecnolog¡a que producen.
La sindicalista y parlamentaria, que se defini¢ como «hija de la Revoluci¢n», puntualiz¢ que en su pa¡s -por decisi¢n del Gobierno que preside Fidel Castro- ni la educaci¢n ni la salud no ser n privatizados.
En cuanto a la recaudaci¢n financiera por la comercializaci¢n del equipamiento, indic¢ que el destino de la misma «a su vez financia, precisamente la salud y la educaci¢n».
Conocida la pol¡tica de apertura econ¢mica, en el mbito de la inversi¢n extranjera, que viene llevando la administraci¢n cubana, le consultamos acerca de los mecanismos de control sobre esos capitales.
«Para eso existen las organizaciones pol¡ticas y de masas, existe el Partido, existe el sindicato y se convive y cada cual realiza su vida. Est un representante del Gobierno, un representante de la administraci¢n extranjera, y por supuesto cuando existe la negociaci¢n, precisamente esa administraci¢n extranjera se acoge a toda la legislaci¢n cubana», se_al¢ Consuegra Viamontes. A_adi¢ que ese tema no hab¡an tenido inconvenientes, puntualizando que los diferentes puntos de vista y las discusiones los han trasladado «al convenio colectivo de trabajo y que luego, despu’s, se hacen en beneficio de los trabajadores».
Habida cuenta que el proyecto encarado en Venezuela por Hugo Ch vez ha despertado expectativas en la izquierda latinoamericana, quisimos conocer la visi¢n de Cuba sobre el controvertido Mandatario.
«Para nosotros, Ch vez, es un Presidente, en primer lugar muy carism tico y tiene algo muy esencial: es un hombre de pueblo. Por eso, creo que con estas dos cosas que le estoy diciendo, sobre todo la oltima, que es un hombre de pueblo pueda expresarse las esperanzas que tiene el pueblo de Cuba y que tenemos todos en que Ch vez pueda hacer transformaciones importantes para el pueblo de Venezuela».
La congresista y sindicalista manifest¢ que los venezolanos hab¡an confirmado, en las recientes elecciones, la confianza que tienen en su administraci¢n. «Yo creo que para los venezolanos, el gobierno de Ch vez les augura un futuro promisorio. Tenemos la esperanza y pensamos desde ya que los cambios se est n dando».
Nuestra oltima consulta gir¢ en su doble condici¢n de sindicalista y diputada. Ante la posibilidad de que se produjera un conflicto gremial, le preguntamos cual de sus dos cargos primaba.
«La Secretaria General del Sindicato, porque yo estoy en la Asamblea y cuando estoy ah¡ pues hago mis votos y discutimos como parlamentarios todos los puntos de vista de nuestra Asamblea», fue su contundente respuesta Consuegra Viamontes, precis¢ que la Asamblea Nacional es un mbito «muy abierto, contrariamente a lo que la gente piensa, se debate much¡simo en Cuba», agregando que ninguna ley «se aprueba a mano alzada».
Reiter¢ que sus dos responsabilidades no entraban en colisi¢n, aclarando que «cuando yo tengo mis funciones como dirigente sindical, las represento». Destac¢ que el hecho de ejercer dos funciones no eran antag¢nicas, «porque el pueblo, los trabajadores, el gobierno, el Partido somos nosotros y todos luchamos por un objetivo comon».
Por oltimo, remarc¢ «entre mis funciones prima la dirigente sindical, yo estoy elegida por los trabajadores y precisamente por eso estoy en la Asamblea tambi’n».
Alberto Bastia
Jefe Corresponsal¡as Informativos.Net en Am’rica Latina