Bush y su esposa Laura se desplazaron hasta el Palacio de la Zarzuela donde fueron recibidos por los Reyes, Juan Carlos y Sofía. Luego, Bush se reunió en Toledo con el jefe del gobierno español José María Aznar. Entre otros temas, habrían considerado la situación en América Latina, donde ambos países tienen fuertes intereses económicos.
Los desplazamientos de George Bush son espectaculares en lo que hace a las medidas de seguridad. Para el recorrido de los kilómetros que median entre Madrid y Toledo fueron utilizados 44 automóviles, la mayoría de ellos tipo limousina y con un blindaje especial. Un helicóptero supervisaba todo el recorrido desde el aire.
El domingo pasado, varios miles de personas habían expresado en la capital española su protesta por la visita del presidente norteamericano. Críticos del desinterés de Bush por el Medio Ambiente, o por la ingerencia militar estadounidense con el Plan Colombia, o por su afinidad con los intereses de las grandes transnacionales de la energía, se manifestaron por las calles de Madrid.
Pero el gobierno espa_ol se muestra como un aliado fiel del presidente Bush, y ha procurado que la visita resulte lo m s agradable posible. Para ello, posiblemente el presidente Aznar ha evitado incursionar en temas que preocupan en Europa, entre ellos, la decisi¢n de Bush de no ratificar el acuerdo de Kyoto sobre cambio clim tico.
No es probable que haya trasladado el reclamo de partidos de la oposici¢n y de organizaciones humanitarias, sobre la pena de muerte en Estados Unidos. Aznar hab¡a recibido solicitudes para que planteara al presidente Bush el rechazo de la sociedad espa_ola a la pena capital.
Fuentes del gobierno espa_ol indicaron que durante esta breve visita de quien es considerado un presidente «amigo», no se mencionar¡an temas que pueden resultar molestos para Bush. Uno de ellos, puede ser el de la Ley Helms Burton de embargo econ¢mico a Cuba y que tambi’n pretende aplicar con sanciones a pa¡ses que comercien con la isla.
Si bien Aznar y Bush coinciden en su antagonismo con Fidel Castro, la ley Helms Burton puede afectar los intereses de numerosas empresas espa_olas radicadas en Cuba.
La gira europea de Bush continuar ma_ana en Bruselas, donde participar de la cumbre de la OTAN. All¡ el tema destacado ser el pol’mico proyecto de escudo antimisiles que pretende reactivar el nuevo presidente norteamericano.
El s bado, en Liublina, ser recibido por el presidente ruso, Vladimir Putin. Bush explicar sus razones para romper unilateralmente el acuerdo firmado con la entonces Uni¢n Sovi’tica en lo que hace al escudo espacial. En esta visita y este terreno no encontrar -seguramente- la complacencia que le recibi¢ en la Espa_a gobernada por Jos’ Mar¡a Aznar. (Euro/QR/Au-Pf/Ri/pt).
Carlos Iaquinandi Castro