En el caso del correo italiano, por ejemplo, del total de 25.000 millones de euros en ayudas estatales de los que 16.000 millones de euros destinados a cubrir los históricamente llamados “costes de ineficiencia” fueron totalmente aprobados por la Comisión.
Según K. Zumwinkel “muy al contrario, Deutsche Post ha llevado a cabo con éxito una reestructuración convirtiéndola ahora en una empresa con beneficios y está siendo castigada con una decisión de devolución del pago totalmente incomprensible” “Nosotros exigimos el mismo trato que el que se aplica a otras compañías postales europeas y vamos a recurrir esta decisión ante el Tribunal Europeo de Justicia”.
El Presidente del grupo dijo que la sentencia actual no está en línea con el resultado de la anterior decisión sobre el mismo caso. En aquella ocasión y tras varios años de investigar las posibles ayudas estatales, la Comisión Europea fue obligada a retirar su petición de multa a DPWN. “No es posible que los mismos hechos se juzguen de manera totalmente distinta en otro procedimiento “ explica K. Zumwinkel.
En la última decisión, la Comisión Europea considera las supuestas ayudas de costes no absorbidos en la división de paquetería (1994-1998) como ayudas estatales. Sin embargo La Comisión Europea ni ha determinado ni ha podido probar que las ayudas hayan sido financiadas con fondos estatales.
Con el fin de identificar el destino de fondos estatales de esta naturaleza, la Comisión Europea debería haber determinado en primer lugar, que la cantidad de las ayudas estatales recibida excede las pérdidas incurridas por el servicio universal de correo. Únicamente en esos casos se puede hablar de ayudas estatales, no solamente bajo la jurisdicción actual, sino también de acuerdo a la sentencia más reciente sobre ayudas estatales a las compañías de correos italiana e irlandesa. Hasta la fecha la Comisión Europea no ha calculado el total de las pérdidas por el servicio universal de correo. No hay pues evidencia del uso de ayudas estatales.
Además Deutsche Post World Net cita una serie de errores de procedimiento e inconsistencias legales en la última decisión ya que la Comisión Europea considera ayuda estatal la distribución de activos de Deutsche Telekom y de Deutsche Post en 1995.
Este tema no se mencionó en la resolución inicial. Por lo tanto para asegurar un juicio justo para Deutsche Post , debería haber una ampliación a la resolución inicial. Si no fuera así, habría un serio error procesal que per se implicaría la anulación de la sentencia.
Como resultado del veredicto, hasta que no haya una decisión del Tribunal Europeo de Justicia, DPWN ha considerado un gasto aproximado de 680 millones de euros en concepto de devolución e intereses de demora. Teniendo en cuenta un beneficio operativo de casi 2.500 millones de euros, este pago correspondería a prácticamente un tercio del beneficio neto de dicho periodo.