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Así se pretende apagar la guerra civil congoleña que ha costado más de 3 millones de vidas. Ni ésta ni otras guerras en el África central, que son las más sanguinarias del planeta, merecen mucha atención pues allí ‘hay negros pero no oro negro’.
La violencia hunde sus raíces en el hecho que los pecios de las exportaciones y la producción del África negra se han desplomado mientras que la deuda externa y el SIDA se han agigantado.
El MLC no es acusado como terrorista y se les invita a gobernar y democratizar su país. La diferencia con Saddam es que éste es patrocinado por Uganda quien apoya a Washington y Londres en su pugna regional contra París.
Isaac Bigio
Analista Internacional
