Durante la guerra fría muchos países conocieron la acción de grupos guerrilleros que lanzaban discursos en pro de la democracia, el secularismo o la igualdad social o sexual. En la postguerra la mayor parte de los Mandela u Ortega han dejado el camino de las armas por el de las urnas.
Los atentados ahora se dan por primera vez a escala global y contra masas. El fundamentalismo musulmán es abiertamente opuesto a los derechos democráticos, laborales o de la mujer. Plantea un retorno al califato oscurantista.
Los Bush primero crearon a Al Qaeda contra Moscú y ahora sus políticas duras ayudan a que ésta crezca y que el integrismo religioso pueda irse transformando en un canal en el cual se expresen muchos descontentos dentro de los 1,300,000 de mahometanos.
Isaac Bigio
Analista Internacional