La oposición quiere retirarse de casi todos esos territorios. Ayer el partido oficialista israelí votó abrumadoramente contra el proyecto de Sharon, inflingiéndole una de sus peores derrotas. De los cuatro partidos cogobernantes sólo el de centro apoya el plan de desconexión. Sharon, para llevar éste a cabo, deberá romper con sus aliados y camaradas para coaligarse con los laboristas. Para tratar de ganarse a los duros de su partido, Sharon ejecutó extrajudicialmente a dos líderes de Gaza y amenazó con asesinar a Arafat. Así logró fortalecer a los palestinos radicales contra los conciliadores, afectando así al plan laborista, que demanda más concesiones territoriales y mejor relación con la Autoridad Palestina.
Isaac Bigio
Analista Internacional