Sin embargo, él mantuvo distancias frente a los neo-conservadores bushistas oponiéndose a invadir Iraq.
Resulto muy dificil que el nuevo papa sea uno liberal. Esto, aunque la constante descerción de decenas de miles de sacerdotes que quieren desposarse y a la escacés de curas, podría empujar más adelante a que la iglesia contemplase aceptar reformas que anglicanos o sinagogas conservadoras han tomado al ordenar sacerdotisas.
El Opus Dei ha ganado fuerza. Entre sus favoritos está Dionigi Tettamanzi, el principal cardenal italiano, Angelo Sodano, secretario de Estado del Vaticano, o el austriaco Christoph Schönborn.
Existe la posibilidad que esta vez pudiese haber un papa del Tercer Mundo (de donde provienen dos de cada tres católicos). Francis Arinze, un conservador nigeriano, tiene chances de ser el primer papa negro. Dos cardenales latinoamericanos también están voceados (el guatemalteco Oscar Rodriguez Maradiaga y el brasilero Claudio Humes).
Dificilmente el nuevo sumo pontífice reine tanto tiempo como Juan Pablo II. El podrá continuar con la escuela de seguir viajando mucho (tal vez llegando incluso a visitar China). Su prioridad ya no será enfrentar al ‘marxismo’ sino hacer frente al crecimiento del Islam, los evangelistas y el agnosticismo.
Isaac Bigio
Analista Internacional