Desde el medioevo hasta el holocausto minorías como los judíos o los gitanos fueron los ‘chivos expiatorios’ de regímenes en crisis. El echarle la culpa de las desgracias internas de una sociedad a una determinada etnia ayuda a desviar problemas.
Hoy el nuevo anti-semitismo se da contra quienes rezan en árabe (la mayor lengua semita). En la Unión Europea hay más de 10 millones de musulmanes quienes son su principal minoría no cristiana. En el mundo uno de cada 5 humanos y uno de cada 4 Estados son mahometanos.
La islamo-fobia termina socavando sociedades pluralistas, genera hostilidad contra los 50 millones de inmigrantes latinos en el norte industrializado y produce, como reacción, el surgimiento de más grupos fundamentalistas islámicos.
Isaac Bigio
Analista Internacional