Para los chilenos reviste especial trascendencia lo que acontece con las principales economías del globo, de modo particular las asiáticas, destino de casi el 40% de las exportaciones, en el que la minería tiene una posición preponderante.
Hace unos días, con motivo de un Encuentro de la Comisión Mixta Minera Chino-Chilena, los representantes chinos informaron que se encuentran desarrollando un Plan de estímulo fiscal para apoyar las inversiones en minería que hagan las empresas chinas en Chile y en otras partes del mundo. Al día de hoy la presencia de mineras chinas en nuestro país está concentrada en un acuerdo entre Minmetals con la multinacional chilena CODELCO, por medio del cual se hizo entrega a la firma local la suma de US$ 500 millones de dólares por 55 mil toneladas de cobre anuales por un lapso 15 años, lo cual permitió avanzar en la explotación de la Minera Gaby.
Chile puede ser un excelente punto de reunión entre empresas chilenas y/o de otras procedencias y compañías chinas. Las inversiones de China en Latinoamérica representan el 18% del total de recursos extranjeros que desembarcan en la región. El pasado año las inversiones de ese país en América Latina, totalizaron US$ 24 mil millones, estas tuvieron como destino principal proyectos de hidrocarburos en Brasil.
El objetivo de las autoridades orientales es aumentar sus inversiones en el continente americano hasta situarse entorno a los US$ 100 mil millones de dólares en el 2014, donde parte podría radicarse en Chile.
Conocer estos movimientos les debería dar pistas para donde dirigirse con vuestros propios negocios, la actividad tiende a acelerarse y es conveniente ir tomando alguna posición para estar cerca de aquellos enclaves en que se auguran expansiones interesantes.
Así tenemos que el Fondo Monetario Internacional, FMI, estima para Chile un crecimiento de un 4%, y eso que para el 2009 se vaticina una contracción de un 1,7%, con un cuarto trimestre en franco arranque alcanzando cifras positivas. En tanto que las autoridades locales consideran que el escenario para el 2010 será algo superior, lo estiman entre un 4,5% y un 5,5%.
Como ya se hace cada vez más cuesta arriba para el inversor hablar de países específicos, se prefiere o tiende más a hablar de región o macro-región, dentro de la cual se busca un punto de apoyo, lanzadera o plataforma, por ejemplo Chile, se recomienda conocer las proyecciones que el FMI calcula para América Latina y el Caribe, tendríamos un decrecimiento al término del 2009 de un -2,5% y una expansión del 2,9% para el año 2010.
Asimismo, la valoración del FMI, indica que Chile, junto a Brasil, Colombia, México y Perú saldrán más rápidamente de este ambiente de complejidades, fundamentalmente debido al ahorro realizado en épocas de prosperidad y a que sus autoridades pudieron aplicar estímulos fiscales a sus respectivas economías.
Chile es el país de América Latina y el Caribe con las mejores condiciones para la inversión pública y privada, así como para la financiación de proyectos. Esta información fue proporcionada por el ex director del Instituto Latinoamericano y del Caribe de Planificación Económica y Social (Ilpes), de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Edgar Ortegón, quien es profesor de la española Universidad de Alcalá de Henares.
Pongan atención. A pesar de la crisis y todo lo que se ha dicho y escrito sobre ella, la inversión extranjera directa no ha dejado de fluir hacia América Latina, de modo particular a Chile. Recordemos, que el 2008 constituyó un año récord en la afluencia de capitales a Sudamérica, Chile y Brasil se encuentran entre los más beneficiados.
No obstante las proyecciones favorables para el período post crisis, se abren enormes oportunidades en algunas áreas en las que existe el deber de profundizar para continuar la marcha de la competitividad. La educación es primordial y transversal a todo el espectro económico, su desarrollo es prioritario. El avance tecnológico y su incorporación en las organizaciones y empresas es algo que no admite demoras.
Los tres principales países de origen de la inversión materializada en Chile entre enero y junio de 2009, son en primer lugar a Estados Unidos, US$ 2.142 millones, equivale a un 79% del total del período, Noruega US$289 millones, a un 10,7% y Australia US$119 millones, a un 4,4%.
Al interior del país, el presidente del Banco Central, José de Gregorio, ente autónomo, reconoció que en Chile las expectativas más negativas ya pasaron, con todo, sostuvo que para que se verifique la recuperación económica, “la política monetaria deberá continuar proveyendo el estímulo necesario a la economía por un tiempo prolongado”.
Es el momento de hacerse presente en Chile, venir con una visión amplia permitirá a las empresas que se establezcan aprovechar no solo las ocasiones que ofrece el país, sino las que se abren dentro de la región y el Asia – Pacífico.
Wolf&Pablo