La pregunta que suele surgir es si estos recorridos empresariales se traducen en una mayor inversión, o simplemente se quedan eso, en posibles proyectos que finalmente no cuajan.
La respuesta es contundente, la Unión Europea es el principal inversor en Chile. Por países, España es líder por número de compañías y el segundo en valor solo por detrás de Estados Unidos.
Según información entregada por el Instituto Nacional de Estadística y el Departamento de Extranjería e Inmigración, señala que la cifra de extranjeros residentes en Chile representa ya el 2% del número total de habitantes del país. De los cuales los españoles con residencia superan los 47 mil, cantidad que sigue creciendo, creemos que puede ser un gran aporte junto al de otras nacionalidades para el desarrollo de nuestra nación.
Se nos informa que el mayor aumento de la población extranjera se dio entre los años 2002 y 2009, período donde el número de inmigrantes creció en el 91%.
«En el caso de Chile es posible observar que entre los factores de atracción se encuentran la estabilidad política, económica y social que el país mantiene a lo largo de varias décadas. Los países de la región ven a Chile como un país seguro, en el cual es posible desarrollar un proyecto de vida», afirmó a este diario Rodrigo Ubilla, subsecretario del Interior.
Asimismo, el Comité de Inversión Extranjera chileno señala que Estados Unidos, Canadá y España son los países que lideraron la inversión extranjera materializada en Chile durante los últimos diez años. Entre 2001 y 2010, los capitales provenientes de estos tres destinos -y que efectivamente se concretaron en proyectos hoy en operaciones- , sumaron US$ 19.324 millones, casi el 60% de los montos materializados en Chile en ese período.
Estados Unidos se ubica en la primera posición, con US$ 7.111 millones, alcanzando su peak en 2009, con US$ 2.858 millones. Le sigue Canadá, con US$ 6.689 millones, de los cuales US$ 2.210 millones corresponden a 2008. En tercer lugar, está España, con US$ 5.523 millones, siendo 2004 su mejor año, con US$ 3.742 millones.
En 1974, Chile se convirtió en el primer país que aplicó una legislación -DL 600- para dar certeza jurídica a los inversionistas extranjeros, mediante la firma de contratos con el Estado. Desde su creación el 67,3% de los proyectos y operaciones materializadas en el país se han amparado en este estatuto, según el Vicepresidente del Comité, Matías Mori.
Los principales sectores a donde ha ido a parar gran parte de esta inversión son la minería con el 33%, la electricidad, gas y agua (19,3%), servicios financieros (9,4%) y comunicaciones (9,3%) y la industria alimentaria.
En Chile un 43,4% creció la inversión extranjera en 2010 respecto de 2009, llegó a US$ 18.200 millones según la Unctad, la tercera mayor alza de la región, tras México y Brasil.
En cuanto al crecimiento de Chile, todas las proyecciones apuntan a que este año lo hará al menos 6%. Los analistas nos indican que lo fuerte se registrará en los primeros tres meses, para luego moderarse a tasas de 5% trimestral.
Pongan atención a este dato proporcionado por Banchile Inversiones, entre enero y marzo, la economía chilena podría registrar su mayor crecimiento trimestral desde finales de 1995, al alcanzar una expansión de 9,5% o 10%.
En la misma línea BBVA, banco español, prevé un alza de 9,1% en el primer trimestre, mientras Celfin Capital apuesta por una cifra más moderada de 8%. El promedio de las últimas estimaciones de 18 analistas consultados por el Latin Consensus Forecast, apunta a que Chile cerrará 2011 con una expansión de 6%, pero que crecerá 8,4% en el primer trimestre.
Rodrigo Aravena, economista jefe de Banchile, indica que el alto crecimiento del primer trimestre se explica por dos elementos: la baja base de comparación producto del terremoto del año pasado y el crecimiento real. «En marzo, que fue el mes en que se sintió el efecto del terremoto, el Imacec podría llegar a 15% fácilmente. Pero también el consumo sigue creciendo con fuerza», acota.
A un año de su integración a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE), Chile aparece como uno de los países que mejor aprovechó el impulso de la recuperación global tras la última recesión.
TOMáS PABLO R.