Que sus inquilinos puedan mantener el estilo de vida del que disfrutan en sus lugares de origen, es el objetivo del concepto-hábitat The Onsider Barcelona. Viene a revolucionar el ya clásico concepto de viviendas de lujo para familias desplazadas por un largo período de tiempo; porque la opción supone contar con un hogar, lejos del hogar. La idea, llevada a cabo por el empresario Jean Paul Rivas, ha sido gestada en un brainstorming por un equipo de profesionales internacionales procedentes del mundo de la arquitectura, del negocio del lujo y las relaciones públicas.
Porque cuando se goza de estatus y un nivel de vida alto con abultados presupuestos, encontrar una vivienda en alquiler adecuada no es el problema. Sin embargo ¿qué ocurre con el estilo de vida? A menudo, esas personas que se desplazan largas temporadas por ocio o por negocios, lo que echan de menos en un lugar que no es su hogar, es esa red de conexiones directas con su ciudad que les hace la vida agradable y garantizan su bienestar, su confort y su lifestyle.
The Onsider Barcelona, que nace con la vocación de replicar el modelo de negocio en otras ciudades, no es un modelo de alojamiento innovador per se, sino por el valor añadido que sus profesionales aportan al día a día del inquilino, el cual, de otra manera, vería como la calidad de su cotidianeidad se deteriora incluso en su jaula de oro. El equipo Onsider ofrece al inquilino el mismo poder y dominio que ostenta en su ciudad, pero en una ciudad desconocida.
Jean Paul Rivas atendía a sus invitados en la inauguración de The Onsider Barcelona, un estupendo edificio rehabilitado en el 306 de la calle Aribau de Barcelona, cuando lo interrumpimos recordándole que teníamos una entrevista programada. Sin entrar de lleno en política, sí es cierto que la combinación “inversor-venezolano-Barcelona” nos parecía muy sugerente, habida cuenta del protagonismo que Venezuela ha pretendido en el “rifi-rafe” pre-electoral nacional.
No se pierdan esta entrevista porque el desenlace es sorprendente. El empresario, que siempre ha defendido la responsabilidad social de las empresas, ha tenido la oportunidad de demostrarlo; y la prueba -con más de 90 años y una vitalidad excepcional- disfrutaba de la fiesta celebrada en su propia casa.
Verán. Cuando Rivas adquirió el edificio, Rosemarie Hess, bibliotecaria y filóloga fundadora de la Biblioteca Alemana de Barcelona en 1955, actual Goethe-Institut, fue desahuciada de su vivienda de toda la vida, hasta que el asunto, incontrolable por parte de los arquitectos, llegó a oídos del empresario. Pensando que Jean Paul Rivas quería verla para echarla definitivamente, Rosemarie Hess se negó a dejarlo entrar en “su casa”, pero el venezolano tenía otras intenciones.
Después de varios meses desplazada a una residencia de lujo con todos los gastos pagados, la dulce pero enérgica señora Hess volverá a finales de mes a ocupar su piso, aunque éste ha sufrido algunas modificaciones. Se ha convertido en una vivienda domótica de alto standing, “llena de botones”, tal y como ella afirma, pero con sus muebles y los recuerdos de sus muchos viajes.
Sin duda, hablamos de empresarios con sensibilidad social. Escuchen esta entrevista.
Gema Castellano @GemaCastellano