Los ministros de Obras Públicas de Chile, Sergio Bitar, y de Bolivia, Walter Delgadillo, estuvieron en Colchane, en la frontera común, y revisaron el avance de las obras comprometidas en diciembre de 2007 por los presidentes Michelle Bachelet, Evo Morales y el de Brasil, Inácio Da Silva. Trazaron el "eje interoceánico central" que conecta los puertos de Santos y Vitoria en el Atlántico con los de Arica e Iquique en el Pacífico.
Delgadillo señaló que Bolivia cumplirá con su parte hacia fines de 2010 o inicios de 2011. Debe concluir el tramo Santa Cruz-Puerto Suárez, que falta para contar con una vía asfaltada entre el Pacífico y el Atlántico, y el ramal que da salida hacia el puerto de Iquique. Para ello realiza obras en 125 km entre Toledo y Pisiga. Chile ya cuenta con carreteras desde la frontera con Bolivia hacia Arica e Iquique, y está mejorando el estándar. Hacia 2010 completará inversiones por US$62 millones, que implican rediseñar tramos de las vías Huara-Colchane y Arica-Tambo Quemado. Con apoyo del BID y la Corporación Andina de Fomento, Bolivia lleva a cabo uno de los mayores esfuerzos viales de su historia, con una inversión de US$800 millones, y que ha priorizado el eje carretero este-oeste, que está avanzado en el 80%.
El ministro boliviano destacó: "Es un avance histórico y marca un cambio cualitativo en nuestras relaciones políticas y económicas". El ministro Sergio Bitar destacó que Bolivia se articula como eje central de América del Sur en un rol integrador. "La voluntad de ambos países de estrechar lazos en conectividad para el desarrollo común permite mirar hacia el futuro. Estamos abordando los temas hídricos, mineros, energéticos y de acceso al Pacífico", dijo.
Como muestra de ello, Bitar expuso a Delgadillo el plan de mediciones que la Dirección General de Aguas realizará a través de seis pozos en los recursos acuíferos del Silala. Esto, en el marco del acuerdo bilateral que puso fin a una histórica disputa mediante una fórmula de distribución de estas aguas. El puerto de Arica se prepara para responder a la potencial transferencia de carga proveniente de los estados del centro del Brasil, un anhelo que existe desde los tiempos de la Junta de Adelanto (años ’50). "Estamos hablando del acceso a mercados gigantes, pero hay que tomarlo con mesura, porque no son volúmenes que vendrán de un día para otro", dijo Matías Laso, gerente del Terminal Portuario Arica.
Tras invertir US$40 millones, la concesionaria logró aumentar la influencia del puerto de Arica hacia el oriente de Bolivia. En 2008 logró transferir una cifra récord de cargas bolivianas, las que siguen creciendo este año a tasas del 40%. Laso advirtió que si esos mercados se vuelcan hacia el Pacífico, será necesario que los diferentes puertos se complementen, porque ninguno va a ser capaz de atender solo la demanda. Perú invierte US$ mil millones en su propio corredor sur a Brasil que va desde el puerto de San Juan al Cusco e Iñarapi, para conectar con Río Branco (Acre). Estará listo a inicios de 2011.