Por países, Alemania lidera la caída en la Europa Occidental con un 3,8%, le siguen Holanda y Austria – 2,8, Italia -2,4%, Irlanda, – 2%, Reino Unido,- 1,9%, España – 1,8%, Bélgica, -1,6%, Portugal -1,2%, Francia -1,2%. La situación en Europa del Este no es más diferente, quizás sus cimientos sean menos consistentes ya que la mayoría de estas naciones están en un proceso de transición hacia una economía de mercado.
Estados Unidos registra una descenso de un 1,6%. Japón podría haber caído entorno al 4% en esta primera medición del año.
En Chile, una de las economías más abiertas del mundo, según el ranking de The Heritage Foundation, se ubica en el puesto número once del mundo, la realidad no es muy diferente. En efecto, el Banco Central redujo la proyección de crecimiento para 2009, desde el rango entre 2% y 3% previsto en enero, a -0,75% y 0,25% y la disminución entre enero y marzo ha sido de un 2,1%
No obstante, los buenos y sólidos fundamentos económicos del país han permitido a la autoridad tomar medidas que mitiguen está tormenta global y prepararse para estar en el grupo de los que primero salgan de esta situación de difícil inestabilidad.
Los principales socios comerciales con los que las empresas chilenas se relacionan con mayor habitualidad viven un ambiente recesivo reduciéndose en algunos casos drásticamente los intercambios comerciales. Como bloque, las 15 naciones que integran la zona euro son el principal destino de las exportaciones locales.
El caso de Japón, no difiere mucho. La confianza radica en que las medidas de estímulo fiscal informadas por el gobierno japonés ayuden a mantener la demanda interna, con crecimiento de 0,6% y de 1,2% para las importaciones. Por su parte a Estados Unidos, le tomará un par de años recuperar su senda, mientras tanto deberemos ir observando algunos avances.
China es el único socio de Chile, que aunque sus compras han disminuido comienzan a dar señales favorables y tal como decíamos la semana pasada esto se refleja en las compras de cobre y otros minerales.
En resumen, hasta aquí nada nuevo, nos daremos vueltas en este escenario por algún tiempo, habrá que darle espacio a las distintas políticas de impulso aplicadas en la mayoría de los estados a que surtan efecto, mientras tanto lo importante será ir tomando nota de los movimientos que las empresas vayan ejecutando para ir capeando las comprometidas condiciones imperantes.
Una de las buenas noticias a nivel planetario vino de la mano del Fondo Monetario Internacional, FMI, ven señales positivas de recuperación económica, pero avisan de que hasta que no se saneen los balances de los bancos no se podrá salir de la crisis.
Estiman que octubre o noviembre de este año pueden ser las fechas para un cambio de tendencia, aunque la corrección no se producirá hasta dentro de un año. Siguen viendo la restablecimiento en la primera mitad de 2010.
Insiste el FMI que el mayor riesgo existente para los próximos 12 meses es que no se limpien las cuentas de las entidades bancarias. Recuerdan la década de los noventa, la crisis de Japón, demuestra que se pueden dedicar sumas enormes a planes de estímulo, pero si no se depuran los estados bancarios no se producirá una salida plena como debiera ser.
Desde nuestra atalaya vemos movimientos de empresas europeas, muchas españolas, optando por la internacionalización, abriéndose a la posibilidad de invertir en otros mercados, el objetivo principal es ganar nuevos puntos de accesos a regiones distintas a las que habitualmente atiende de sus emplazamientos de origen.
En este entorno Chile tiene enormes posibilidades que ofrecer. Los famosos Tratados de Libre Comercio y el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea son instrumentos que atraen y hacen más competitivo el comercio entre un número importante de regiones esparcidas por el globo.
Las empresas de los sectores Alimentario y Manufacturas lo tienen mejor. Los exportadores de productos agrícolas, ganadería y salmón, tendrán buena acogida en las plazas extranjeras.
Un análisis de Chile Alimentos indica que las exportaciones agroalimentarias chilenas están bastante más cerca de la del cobre de lo que creemos. De ellos, una gran parte la constituyen los alimentos procesados.
Según esta misma organización, más de 6 millones de personas consumen salmón chileno cada día, 6,5 millones de personas toman zumos chilenos cada día, 7 millones de personas toman vino chileno cada día y más de 9 millones de personas comen mariscos y otros pescados chilenos cada día. Esto conlleva que la industria de alimentos representa el 17% del empleo del país y 23% de las exportaciones.
Energías Renovables y las Infraestructuras están dentro de las áreas con mayores proyecciones. La Construcción no está tan alicaída como pareciera ser. Rehabilitación, oficinas, viviendas protegidas o Programa Patrimonio de Valparaíso no se les debe perder la pista.
Presten atención a los esfuerzos de los organismos chilenos (CORFO, ProChile, Asociaciones Empresariales) y a los extranjeros, interesados en acercar a empresas de distintos lugares para afrontar unidos esfuerzos de mayor envergadura y calado. Estos son pasos reales para encarar el futuro con mayores garantía, optimismo y sobre todo confianza.
Wolf & Pablo