Sin ir más lejos la Delegación de CORFO en España -después de una primera semana concentrada en colaborar y atender las diferentes demandas de un elevado número de empresas españolas radicadas en Chile- hemos pasado a estar inmersos en nuestra cotidianidad, en la que emprendedores españoles desean ir a Chile y continuar adelante con sus respectivos proyectos de inversión.
Tuvimos ocasión de tomar parte en una jornada monográfica dedicada al terremoto organizada por la Confederación Española de Organizaciones Empresariales, CEOE, a la que asistieron representantes de Asociaciones Empresariales y firmas, diría que la mayoría ya asentada en Chile y otras con interés en hacerlo.
Desde 1990, las sociedades extranjeras han invertido más de US$ 95 mil millones en Chile, tanto en el desarrollo de nuevos proyectos, como en fusiones y adquisiciones. Cualquiera que se implante entre nosotros sabe por los chilenos de los megaterremotos, pero no imaginan su verdadera dimensión hasta que ocurre. El anterior con características parecidas, aunque algo más bajo en magnitud fue en 1985, por lo que este último fue como un bautismo para estos inversionistas. “Al fin sabemos que es un terremoto de proporciones” era uno de los comentarios que se escucharon en la CEOE. Ha causado admiración la calidad de la construcción chilena más allá de los casos individualizados con fracturas. Aquí se reconoce una fortaleza y seriedad que bien podría ser exportada a otros mercados.
Otra materia que resultó robustecida fue la muy buena posición que Chile alcanza como un país poco corrupto y transparente según Transparencia Internacional. Esto salió a colación de que la violencia del seísmo respetó mayoritariamente las construcciones que se han levantado atendiendo la exigente normativa antisísmica, lo que indica que las compañías constructoras la cumplen a cabalidad empleando los materiales adecuados, evitando entrar en componendas que podrían traer graves consecuencias a quienes las pudieran padecer.
Deducimos que un gran número de los que atendieron la invitación de la CEOE, están muy satisfechos con sus inversiones en Chile.
Seguidamente acudimos a la Bussines TIC 2010 en Sevilla, un gran evento en el que se dan cita casas españolas y extranjeras del sector de las tecnologías de la información y las comunicaciones. Hay ya un grupo de este sector preparado para ir a Chile y esperan que la cantidad crezca a medida que se acerque la fecha del viaje. Los empresarios son concientes de que Chile seguirá avanzando en su Objetivo País con igual o mayor fuerza, existe plena confianza en ello.
Paralelamente continuamos en nuestros habituales procesos de reclutamiento empresarial provisto de planes de inversión para los Foros Agroalimentarios (6 al 11 de junio), Industria Auxiliar de la Minería (27 al 30 de septiembre), Energías Renovables (noviembre) y Encuentro Hispano Chileno (noviembre), las inscripciones siguen su ritmo acostumbrado. Estamos manteniendo entrevistas individuales donde cada uno plantea sus inquietudes, deseando conocer las oportunidades que se le presentan como sector y los soportes que puede recibir.
Esta situación no es solo exclusiva de España. Horas después del sismo y mientras la información acerca de lo ocurrido en Chile todavía era muy difusa, los teléfonos de las oficinas de ProChile en el extranjero no dejaban de sonar. Alejandro Cerda, director comercial de la entidad en Nueva York, cuenta que apenas pudieron comenzaron a entregar información sobre el estado del país. El personero cuenta que su cronograma sigue tan intenso como siempre, y que la próxima semana viajará a Chile con una delegación de la cadena de supermercados premium Food Emporium. "Hemos ido a ferias y hay gente que ahora está más interesada en invertir en Chile, motivada por la reconstrucción", dice.
En el día del terremoto, el escenario no era muy diferente en Santiago. En las oficinas de la Asociación de Exportadores de Chile (Asoex), Ronald Bown, presidente del organismo, dice que lo primero que hicieron fue medir el impacto de la catástrofe en la infraestructura portuaria, y después calmar a los socios comerciales en el exterior. "Fuimos cautos en la información. Nos interesaba dejar en claro que el efecto promedio en la industria no había sido tan grande", dice.
Existe consenso en que la imagen de Chile como destino turístico es la que más afectada se ha visto. Todavía no hay cifras globales, pero en algunas zonas como el Valle de Colchagua las reservas hoteleras han caído en 90%. En Turismo Chile cuentan que los operadores internacionales han suspendido los paquetes al país, pero que no los han cancelado. De hecho, por estos días Pablo Moll, gerente general de la agrupación, se encuentra en Berlín en la feria de turismo ITB. Allí se mostró un mapa en el que se destaca que la zona del terremoto estaba muy lejos de destinos como San Pedro de Atacama o las Torres del Paine.
Ahora el país ha entrado en una segunda etapa que apunta a enfrentar las urgencias actuales, como son otorgar viviendas o soluciones de emergencia a quienes perdieron sus hogares antes de que se inicie el invierno. También garantizar a todos los menores el inicio del año escolar dentro de los próximos 40 días, para que ninguno se vea perjudicado en ese sentido por la catástrofe, así como restablecer la conectividad de pueblos y ciudades reparando caminos, carreteras, puertos y aeropuertos.
En todos lados chilenos y extranjeros se están multiplicando, por un lado para reconstruir y por otro a continuar adelante respondiendo a los compromisos contraídos sin perder la estela del desarrollo a la que venían haciendo frente.
Tomás Pablo R.
