La última «locura» de las madres de la Plaza de Mayo también se convierte en realidad: se inauguró en Buenos Aires la «Universidad Popular de las Madres». Hebe de Bonafini, Presidenta de la Asociación de las Madres de la Plaza de Mayo habla sobre este tema con Carlos Iaquinandi Castro, corresponsal de Púlsar en España.
Hebe, +cómo madura la idea de la Universidad de las Madres y cómo llega a concretarse?
La idea surge a partir de la librería, café literario y salón de actos que juntó tanta gente. No solo jóvenes, sino intelectuales que se citan allí para reuniones. Ellos mismos, muchos de ellos profesores, nos propusieron hacer seminarios. El éxito fue tan impresionante que surgió la idea de convertirlo en universidad. Al principio parecía otra «locura», pero las madres estamos tan acostumbradas a las «locuras», que empezamos a conversarlo como si fuera posible. Nos dimos cuenta que teníamos los profesores, el lugar, los jóvenes interesados, así que adelante… Comenzamos con dos carreras, pero despu’s vinieron mas profesores con proyectos y llegamos a cinco carreras. Y nos confirm¢ que hay mucha gente que quiere a las Madres, que nuestra forma de pensar prendi¢ en much¡sima gente. Y as¡ con el esfuerzo y el amor de mucha gente el proyecto sali¢ adelante y vamos a inaugurar el 6 de abril con 600 alumnos y 100 profesores. Entre otras carreras, sicolog¡a social, con cuatro a_os de duraci¢n, derechos humanos, la mas completa, con una gran cantidad de profesores y que incluir la historia de las Madres, pactos internacionales, todos los juicios que iniciamos en el pa¡s y el en exterior, violencia en las calles, violencia en las c rceles, derecho de la mujer, tercera edad, homosexualidad, racismo, en fin van a estar todos los temas con muy buenos profesores. Tambi’n habr periodismo, periodismo comprometido, alternativo, como lo es el «Diario de las Madres» y que va a tener una radio.
+ Una radio ?
Una radio, porque creemos que la radio es un medio de difusi¢n importante. Yo soy una ferviente admiradora de la radio, primero porque te hace so_ar, imaginas las situaciones a partir de la persona que te habla y despu’s porque la pod’s llevar a todos lados, si est s lavando, si est s arreglando las plantas, si est s planchando, comiendo. Mi madre, que tiene 90 a_os me pide: «Che, decime que programa es bueno para escuchar por la noche». Ella tambi’n se quiere informar y cuando consegu¡s compa_eros que informan, la radio es adem s de un gran compa_ero, un gran formador de opini¢n importante.
¨Qu’ m s habr en la Universidad de las Madres?
Bueno, tambi’n habr arte, arte comprometido, muralismo , arte callejero, teatro, cine, televisi¢n, narrativa, direcci¢n, video documental y pol¡tico. Estas carreras van a tener tres materias obligatorias que son formaci¢n pol¡tica, ‘tica y de principios y solidaridad. En los seminarios Mari tegui, Cook, Mart¡, Bol¡var…todos los que han sido silenciados, sobre los que no hay casi investigaci¢n ni seminarios. Les hemos propuesto a los j¢venes de las reas sociales que sean ellos los que preparen los seminarios.
Y dos veces por semana habr un profesor para ense_ar a leer, porque ellos saben que hoy los chicos no leen o leen muy poco. Y es necesario saber leer bien para poder aprender.
+Ese es el nivel que se requiere para acceder a la Universidad de las Madres: simplemente saber leer? + No se pide ninguna titulaci¢n previa?
No nada, estar alfabetizado, saber leer y amar el saber. Nosotros decimos a todo el que se inscribe en esta universidad que no vengan a estudiar para conseguir trabajo o para conseguir un t¡tulo. No, primero tienen que venir a estudiar para saber, y si despu’s consiguen un trabajo, fant stico.
Tienen que amar el saber, porque la gente que no sabe es f cilmente dominada. La gente que no sabe para que estudia ni para que le sirve la carrera, es un fracaso como persona y nosotros aspiramos a que los j¢venes que vengan a esta universidad tengan las pr cticas en los barrios marginales, porque es indispensable ayudar a trabajar, comprender, escuchar a la gente que est viviendo en la mayor marginalidad, sin trabajo, sin comida, siendo mendigo en forma permanente, esperando que le den algo. Eso tiene a las Madres preocupadas desde hace mucho tiempo y fue la preocupaci¢n de nuestros hijos, por lo que dieron la vida.
Hebe, muchos de los estudios que se hacen tanto aqu¡ en Europa como en el resto del mundo, son para mostrar, para ostentar, para conseguir un puesto de trabajo, para escalar una posici¢n social. Todo eso implica un mundo de homologaciones, de cuestiones administrativas.+La Universidad de las Madres va a pasar tambi’n por el tema de las homologaciones?
Nosotros creemos que por derecho propio el t¡tulo de las Madres tenga valor. No lo vamos a homologar. Nosotros decimos que los que perdonan a los asesinos, los que conviven con ellos no tienen autoridad moral para darnos ningon t¡tulo.
Vamos a entregar -ya hemos entregado en los seminarios- diplomas de la Universidad de las Madres. Est n llenos de amor. Esta Universidad est creada en el amor a nuestros hijos, a su proyecto de justicia que fue aniquilado, ese proyecto hermoso que ten¡an los 30 mil desaparecidos, los 10 mil fusilados en las calles, los nueve mil presos pol¡ticos, el mill¢n y medio que tuvo que salir al exilio. Era un proyecto hermoso. Esto es muy peque_ito al lado de lo que ellos quer¡an, pero aspiramos a que los j¢venes, a los que les transfundimos esa sangre de ellos a nosotras, de nosotras a ellos, tengan la fuerza para llevar adelante un proyecto revolucionario, transformador, que nos permita caminar por las calles de Buenos Aires y frente a los cubos de basura, sin ver ni_os revolvi’ndola, buscando, sin ver ni_os prostituy’ndose. El dia que vea que eso es posible, voy a ser muy feliz. Desde donde est’, porque s’ que no lo voy a ver tan pronto, pero en algon lugar donde est’, por ah¡, volando por el mundo, por el cielo, por la tierra, no s’ donde, voy a estar feliz. Porque esa es mi onica venganza, la venganza a la que aspiro, siempre digo, al asesinato y a la tortura a la que fueron sometidos nuestros hijos, es que el pueblo sea feliz. Y no hay pueblo que pueda ser feliz con ni_os comiendo mierda y prostituy’ndose en las calles. Esto nos taladra, nos pega, nos duele. No tenemos coraje de hacerles preguntas a los chicos. ¨Qu’ les vas a preguntar a un pibe de estos? Y entonces queremos que los j¢venes que estudien en nuestra universidad, se animen a trabajar en proyectos para que estos pibes sean nuestros pr¢ximos ciudadanos, nuestros iguales. No como ahora se los denomina, despectivamente como «los ni_os de la calle». Y aunque algunos les acoja y les d’ de comer, est n haciendo los nuevos esclavos que -permanentemente, como mendigos- tienen que andar con una ollita pidiendo comida. Y yo para mis ni_os, para mis hijos, que ellos tambi’n son mis hijos, no quiero este mundo. Porque la verdad es que si me muero y no veo que algo est cambiando en esto, me voy a morir muy desdichada.
Desde hace muchos a_os, Reus, Catalunya, muchas ciudades europeas les han recibido con cari_o y con respeto. + Que palabras les dejas a toda esa gente solidaria ?
Siempre me llam¢ la atenci¢n el trabajo a distancia, porque no es f cil. Si no es f cil trabajar all , todos los d¡as, todas las horas, con todos los problemas encima, es mas dif¡cil trabajar a distancia, cuando no se vive cotidianamente esa realidad, se desconocen los proyectos. Por eso agradecemos infinitamente a la gente que piensa en nosotros, y nos siguen ayudando, nos siguen acompa_ando. Es muy importante para nosotras.
¨De que forma se puede ayudar desde aqu¡ al proyecto de la Universidad ?
Primero difundi’ndolo, consiguiendo que se conozca. Luego, que las universidades como la de Salamanca, que ya lo hizo, Par¡s 8, la Complutense, Carlos Tercero, la de Bilbao, adhieran, colaboren…estas universidades han prometido enviar a sus rectores a la inauguraci¢n, enviar catedr ticos para participar del Comit’ Internacional, libros, material. Toda ayuda ser bienvenida y bien utilizada.
Dentro de pocos d¡as este proyecto, dejar de ser «locura», se convertir en realidad. ¨Cu l ser la pr¢xima ?
No lo sabemos, ya saldr . Seguramente tendr que ver con esta necesidad de cambio.
No podemos admitir esta realidad dolorosa de los pibes buscando entre la basura, prostituy’ndose. Esta ni_ez que no vuelve a casa por la noche. Yo tengo un chico amigo que lo adopt¢ un matrimonio. Fue un ni_o de estos que vive en la calle, que no «son» de la calle, porque la calle no puede parir hijos. Y el vivi¢ desde los 3 a los 6 a_os en la calle . Lo pusieron en un orfanato, y se escap¢. Y el d¡a que cumpli¢ 12 a_os, ya adoptado por esta familia, le preguntaron que quer¡a para el cumplea_os…si una bicicleta… Dijo que no, que quer¡a una c mara fotogr fica. «Quiero que me lleven a los lugares donde yo dorm¡a -dijo- porque sab’s una cosa: siempre hab¡a alguien que de noche me tapaba y quiero ver se le encuentro, porque nunca le v¡ la cara.»
Ese chico es hoy un chico hermoso, que trabaja en los barrios, est estudiando… pero cu ntos pibes de estos no tienen esta posibilidad de que una familia los adopte, que una familia los quiera y los pueda atender. Ante este tipo de respuestas est la otra respuesta: la de la familia que tambi’n los quiere, el padre y la madre que tambi’n los quiere, pero no tiene mas remedio que dejarlos ir a la calle para que coman. Y no tienen otra salida que dejarlos que coman de cualquier manera, abriendo la puerta de los coches, prostituy’ndose, robando, asaltando a la gente, porque el sistema les ense_a que su propia vida no vale nada y terminan asesinados por la polic¡a, diciendo que son grandes criminales y los onicos criminales est n en los gobiernos que no tienen ningon proyecto para este drama espantoso que nos est comiendo el alma.