En declaraciones periodísticas -concretadas en la Casa de Gobierno- el radical Chrystian Colombo, Jefe de Gabinete de Ministros, puntualizó: «Lo que estamos haciendo es iniciar conversaciones sobre la necesidad de la ley de coparticipación federal. Nos hemos comprometido a darle estado parlamentario antes que finalice este año».
Recordemos que en la Carta de Intención, firmada entre el Estado argentino y el Fondo Monetario Internacional, el organismo le exigió ûcomo prenda de cambio para aprobar el viernes 7 de setiembre, el salvataje extra de 8 mil millones de dólares- al Ejecutivo aliancista que modifique la normativa legal por la cual, el Estado nacional gira ûmensualmente- 1364 millones de pesos o dólares- a las 23 provincias, de acuerdo al coeficiente correspondiente.
Por la nueva ley se eliminará la suma fija, y el Gobierno central solamente transferirá a los distritos un porcentaje de la recaudación impositiva. Una suerte de vuelta de tuerca más para cumplir con el equilibrio en las cuentas fiscales o «d’ficit cero», marco legal aprobado -a finales de julio pasado- por los legisladores del oficialismo.
Con una recaudaci¢n tributaria en baja, producto de la recesi¢n que golpea a la econom¡a dom’stica desde julio de 1998, una muda en la transferencia -haciendo que su giro sea m¢vil- reducir los env¡os.
Como la ley debe ser sancionada por unanimidad, tanto por el Parlamento Nacional como por los provinciales, y dado que 14 distritos son gobernados por el peronismo -principal fuerza opositora- el funcionario estim¢ que la norma «va a ser muy discutida».
En las oltimas semanas, el Gobierno ha insistido en que no estaba en condiciones de garantizar -hasta fin de 2001- el giro de las remesas y, si la recaudaci¢n impositiva no lograra recuperarse, la administraci¢n deber¡a apelar a un nuevo ajuste en los sueldos de los estatales y en los haberes de las pasividades.
Para equilibrar sus cuentas fiscales, financiando sus gastos s¢lo con la percepci¢n tributaria, en julio pasado el Estado -v¡a decreto- pod¢ en un 13%, para el trimestre julio-setiembre, los salarios poblicos y las jubilaciones que superan los 575 pesos.
Menudo debate el que comenz¢ este mi’rcoles.
Para el Gobierno porque no puede apartarse un mil¡metro de lo que se comprometi¢ con el FMI, sino el organismo de cr’dito le cerrar¡a los grifos y los fondos adicionales quedar¡an trabados.
La prisa para que la ley sea votada antes de finales de a_o, tiene su raz¢n de ser. Algunos sondeos pronostican que el oficialismo podr¡a perder la mayor¡a en la C mara Baja y como el peronismo controla -desde 1983- el Senado, y presumiblemente tambi’n lo har¡a en Diputados, la fecha tope para que la modificaci¢n vea la luz es el 9 de diciembre, el d¡a previo a que asuman los parlamentarios electos en el pr¢ximo mes.
Para los gobernadores, independientemente del color pol¡tico, una reducci¢n en los fondos coparticipados podr¡a poner en riesgo el funcionamiento del engranaje administrativo. No debemos olvidar que los Estados provinciales, son los empleadores por excelencia para la mayor¡a de quienes habitan la Argentina profunda. Una merma en los dineros girados forzar¡a a los Mandatarios distritales a tener que recortar los sueldos, una noticia nada agradable de cara a los comicios.