Los palestinos se muestran cada vez más impacientes ante las acciones del primer ministro israelí Barak. Ayer lunes,- y pese a que la semana pasada mantuvo toda discreción, mientras miembros de su gabinete acusaban a Barak de hacer un doble juego, aceptando los quince días que acordaron de reflexión -, Yasse Arafat ha acusado públicamente a Barak, de tergiversar la aplicación de la retirada militar en Cisjordania prevista por el acuerdo de Wye, mientras que Tel Aviv restaba importancia a la crisis que el fin de semana ha resurgido con los palestinos.
Según el presidente de la autoridad palestina, existen tentativas por parte de Israel de no aplicar en su integridad y honestamente lo que se ha pactado. Barak había sido acusado con anterioridad por las altas autoridades palestinas, pero Arafat no se había pronunciado hasta ayer, cuando advirtió que tanto palestinos como americanos y egipcios, están de acuerdo en la necesidad de aplicar los acuerdos de Wye, siendo Israel quién está interfiriendo el proceso.
Mientras Tel Aviv minimizaba la crisis surgida, los palestinos declaraban que no se trata de un malentendido sino que hay que hablar de una » seria crisis».
LOS PALESTINOS HABLAN DE QUE HA SURGIDO UNA » SERIA CRISIS» CON ISRAEL
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