Según algunas fuentes, el Gobierno estaría dispuesto a tener un gesto importante y significativo con los presos de la banda armada ETA, si los contactos que van a tener lugar en los próximos días son considerados "fructíferos" o, al menos, "positivos" por el Ejecutivo.
Un centenar de los 410 presos de ETA podrían obtener terceros grados y otras medidas penitenciarias favorecedoras si ETA y Gobierno acercan sus posturas en el largo camino hacia la pacificación de Euskadi. Entre los gestos que el Gobierno exigiría a la banda armada para iniciar estas medidas podría estar el compromiso serio e inequívoco de que la organización terrorista abandone definitivamente sus armas.
Desde que la banda armada ETA declaró su tregua unilateral hace once meses, el Gobierno tan sólo ha concedido 25 traslados de presos para acercarlos al País Vasco.