Los fiscales estatales de España, apelaron ante la Audiencia Nacional la decisión del Juez Baltasar Garzón de solicitar la prisión de 98 militares represores, que habrían actuado en la dictadura de los años 1976 y 1983. Los militares argentinos son acusados de crímenes contra la humanidad y torturas.
Según la Oficina de los fiscales del Estado, a España no le corresponde juzgar crímenes cometidos por ciudadanos extranjeros, fuera de España. Este martes el juez Baltasar Garzón de la Audiencia Nacional española formuló cargos contra los militares argentinos y pidió su detención provisional.
A la apelación presentada por la fiscalía, se suma que uno de los testigos de Baltasar Garzón. El exoficial argentino Adolfo Scilingo, negó todas sus declaraciones anteriores. El exoficial declaró anteriormente los abusos cometidos por los militares durante la dictadura.
Scilingo dijo que el juez Garzón lo presionó para que mienta bajo juramento. Scilingo viajó a España voluntariamente en 1997 y narr¢ los detalles de la operaci¢n conocida como los «vuelos de la muerte», a trav’s de los cuales los opositores eran drogados y lanzados desde aviones al mar. (Euro/YH/Au-Mt/Dh-Pl/ap)
EL TESTIGO DE GARZÓN SE RETRACTA Y AFIRMA QUE EL JUEZ LO PRESIONÓ PARA QUE MINTIERA BAJO JURAMENTO
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