En el primer mes del nuevo siglo, el ritmo anual de ventas de nuevas viviendas llegó a 921 mil unidades, la cifra más baja desde que en enero de 1994 la caída en la comercialización se había situado en el 23,8%.
Con relación al último mes de 2000, la tasa anual de transacciones había llegado a que se comercializaran 1,034 millones de viviendas, una cifra que no tiene antecedente en los últimos años.
La Asociación Nacional de Bienes Raíces había precisado, el lunes pasado que la venta de propiedades usadas, en enero, había caído un 6,6%.
Si tomamos en consideración ambos indicadores, los referidos a las transacciones en viviendas nuevas y en usadas, todo hace presuponer que la preocupación de los consumidores se centra en la brusca desaceleración que sufre, desde mediados del año precedente, la economía norteamericana, dado que no les resultó atractivo el recorte que experimentaron las tasas de interés para los créditos hipotecarios, que en promedio, para el mes de enero se ubicaron en el 7,03%, 35 d’cimas por debajo del ¡ndice de diciembre de 2000.
Habr que esperar si una nueva disminuci¢n en las tasas de inter’s, que estudiar la Reserva Federal en su reuni¢n del 20 de marzo, les insufla una dosis de optimismo a los consumidores estadounidenses y as¡ el mercado inmobiliario volver a moverse.
