El comité bi-partidario de senadores es muy duro contra la CIA y su vicepresidente llega incluso a decir que con la información hoy conocida no hubiese votado por la guerra, la misma que ha dañado la credibilidad de su país.
En Inglaterra el comité liderado por Lord Butler acusaría al gobierno de haber ignorado a sus asesores legales quienes le decían que atacar Iraq sin venia de la ONU sería ilegal y cuestionaría al MI-6 por haber alterado informes de inteligencia por presiones políticas.
Las armas de destrucción masivas que podrían minar a Blair y Bush no son las que no existían en Iraq sino que van siendo las crecientes revelaciones que vienen bombardeando su credibilidad. Un primer efecto de dichos informes será golpear al laborismo en las parlamentarias que se darán la semana entrante en dos distritos británicos.
Isaac Bigio
Analista Internacional