Representantes de los 175 Estados miembros debatirán hasta el 21 de junio los grandes problemas, desafíos y posible soluciones que entornan al mundo del trabajo y del desempleo.
Tarea ardua si se consideran las propias cifras de la organización onusiana presentada este martes. En el planeta existen más de 160 millones de desempleados oficialmente reconocidos. De cada cien trabajadores, 6 no tienen hoy empleo y 16 otros no ganan lo suficiente como para mantener su familia -menos de un dólar por persona y por día-.
Además, 8 de cada 10 trabajadores en el mundo no gozan hoy del beneficio de una protección social adecuada y suficiente. En numerosos países la protección oficial a la vejez -derecho a la jubilación- y a la invalidez, así como a los gastos de enfermedad no existen o favorecen a un porcentaje mínimo de la población.
En el Africa subsahariana -o Africa «negra»- , por ejemplo, el régimen legal de seguridad social beneficia a no más de un 10 % de la población económicamente activa.
En este marco, el debate de la Conferencia anual adquiere una gran actualidad. Sus objetivos principales son claros, tal como lo define el informe anual presentado este martes y denominando «Reducir el d’ficit de trabajo decente».
El chileno Juan Somav¡a, director general de la OIT expres¢ en su discurso inaugural la profunda preocupaci¢n por las insuficientes posibilidades de empleo y de protecci¢n social en el mundo.
Y si bien reconoce que el ingreso medio mundial est en proceso de aumento, es evidente, para Somav¡a, que el mismo se acompa_a de desigualdades persistentes.
El subempleo como expresi¢n de esa polarizaci¢n social, toca hoy, segon datos de la OIT a m s de mil millones de personas en el mundo.
En el Informe anual la OIT adem s de abogar por m s empleo y mejor protecci¢n social, reitera la necesidad de eliminar todas las formas de trabajo forzado, de esclavitud y de tr fico de seres humanos. (Mu/QR/Oi-Ci/Dh-Pb-Pe/pt).
Sergio Ferrari.