El socialismo chileno cree que su mérito consiste en haberse distanciado de su pasado allendista para abrazar recetas monetarias sembradas por Pinochet y no despertar mayores animosidades por parte de Washington o del pujante empresariado local.
Este giro hacia la derecha le acerca, al igual que Blair en Inglaterra, a una re-elección.
La izquierda comunista tratará de quitarles votos en los sectores pobres donde esas políticas generan descontentos. La derecha querrá obstaculizar el triunfo ‘socialista’ atacando a Bachelet desde dos candidaturas con ángulos distintos. Lavín usará mucho populismo y Piñera (dueño de LAN) mostrará un rostro anti-pinochetista y liberal que podría restarle votos centristas y demo-cristianos.
Isaac Bigio
Analista Internacional