La neozelandesa precisó que "si bien las partes habían alcanzado un compromiso inicial en octubre del año pasado, el mismo estaba sujeto a la aprobación de ciertas instancias, la última de las cuales se terminó de cumplir recientemente". Una de las instancias más importantes era el visto bueno de la Iglesia Católica en Roma.
Y es que el objetivo del empresario Juan Luis Undurraga cuando creó la fundación fue entregar los recursos destinados a beneficiar a niños con síndrome de Down. En esta línea, creó una fundación de derecho canónico, por lo que la venta de la participación en Soprole debía ser visada primero por el Arzobispado de Santiago y luego por la Santa Sede.
Los productores lecheros, agrupados en Fedeleche, no han visto con buenos ojos la operación. Consideran que abriría la puerta para que Soprole y la multinacional Nestlé concreten su intención de crear una nueva empresa conjunta. Con ese objetivo, presentaron hace casi dos años una consulta al Tribunal de la Competencia, la cual fue retirada a los pocos meses.