Analizaron en 405 ciudades del continente americano una serie de factores para diseñar la clasificación, organizándolos luego en seis categorías: potencial económico, recursos humanos, efectividad de los costos, calidad de vida, infraestructura y si la ciudad es amistosa para hacer negocios. Se estudió una séptima variable, de promoción de IED, pero sólo 100 ciudades enviaron sus estrategias. Se asignaron puntajes y luego un jurado de cinco personas decidió.
Lima aparece en el segundo lugar, seguida de Monterrey, Bogotá, San José de Costa Rica y Sao Paulo, en Brasil.
De otra parte, un estudio de la Pontificia Universidad Católica, con el apoyo de la Cámara Chilena de la Construcción, determinó que Iquique-Alto Hospicio, Antofagasta, Coquimbo-La Serena y Puerto Montt-Puerto Varas, encabezan la lista de diez áreas metropolitanas con mejor ambiente de negocios en Chile.
Ello resultó tras la revisión de 140 variables, con información pública y privada, entre las cuales destacan condiciones de infraestructura turística, permisos de edificación para industria, servicios y comercio y datos de la encuesta Casen, entre otros.
Los responsables de este trabajo precisaron que estas ciudades lideran, debido a su capacidad para generar inversiones, o emprendimientos en relación con el tamaño de su población.
En el caso de Iquique se indica que la minería, el turismo, el comercio y el rubro inmobiliario están generando un fuerte flujo de negocios en esa ciudad.
Desde Antofagasta, estiman que las inversiones privadas al año suman unos US$ 800 millones de dólares, y las públicas muy cerca de los US$ 200 millones, con un bajo desempleo en la zona, el 6,3% un punto por debajo del promedio nacional.
Ambas ciudades Iquique y Antofagasta, reclaman más recursos para mejoras en las infraestructuras, sobre todo vial. La calidad de vida es cada vez mejor, sería deseable reducir la cifra de victimización por delitos.
En Puerto Varas, la mayor inversión prevista será la construcción de un mall en el centro de la ciudad y un strip center.
Finalmente, comentarles que en el primer trimestre de este 2011, doce de las catorce regiones chilenas presentaron variaciones positivas en el Indicador de Actividad Económica Regional, INACER, indicador de tendencia de la actividad económica agregada regional, que busca estimar los ritmos de aceleración o estancamiento. Además, estima la variación de las cantidades producidas de bienes y servicios, con relación a un período base que corresponde al promedio de 1996.
El INACER fue construido tomando como base once sectores económicos: agropecuario-silvícola; pesca; minería; industria manufacturera; electricidad, gas y agua; construcción; comercio y transportes (con subsectores de almacenamiento y comunicaciones); servicios financieros; otros servicios (servicios personales y administración pública); y propiedad de vivienda.
Las Regiones de Biobío, Atacama y Coquimbo, fueron las que mostraron un mayor crecimiento, comparado con igual período de 2010 registraron expansiones de 22,7%, 17,6% y 10,1% respectivamente.
El desempeño favorable de Biobío se explica, principalmente, por la baja base de comparación del primer trimestre 2010, debido a los daños que generó el terremoto de finales de febrero que mermó la economía de la región, especialmente, sobre la capacidad productiva del sector industrial.
En el caso de Atacama el incremento en los sectores de Construcción, Servicios Financieros y Minería impulsaron la actividad regional.
Por sectores, Comercio, Restaurantes y Hoteles presentó una evolución favorable en todas las regiones, destacando las regiones de Tarapacá y O’Higgins.
El sector Transporte y Comunicaciones también registró un comportamiento positivo en la mayor parte de las regiones, mostrando un importante incremento en la región de Arica y Parinacota.
Chile entero es una gran oportunidad para recibir inversión extranjera directa, siendo la mejor, o si lo prefieren, una de las mejores plataformas mundiales para acceder con bienes y servicios en condiciones muy ventajosa a cualquier territorio del globo por distante que este esté.
